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Tegucigalpa, Honduras.
Luego que se aclarara la incertidumbre de Ligia Obando con la prueba de ADN que se les practicó, este día fue dado de alta el niño, a quien llamarán «Enmanuel».
Una vez entregado en la sala de recién nacidos, la madre lo tomó en sus brazos con ternura y no dudó en darle muchos besos, los que tenía reservados tras la confusión vivida.
Antes de salir de la sala de neonatología, Obando, vistió al pequeño de amarillo, mientras éste disfrutaba de un ininterrumpido sueño.
Al salir del elevador para llegar al primer control de los guardias, los esperaban ansiosos los medios de comunicación, quienes desde el inicio le dieron seguimiento a la historia.
Al salir del Hospital Escuela Universitario los padres y abuelos, llevaron al bebé a la Iglesia para agradecer a Dios por él.