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En respuesta al último informe del Observatorio de Derechos Humanos de las Mujeres (CDM) que revela un preocupante incremento de femicidios en Honduras, la coordinadora residente de la ONU, Alice Shackelford, ha expresado su profunda preocupación. Según el informe, en 2023 se registraron 386 muertes violentas de mujeres en el país centroamericano, cifra que continúa en aumento en el presente año. Shackelford ha instado a unir esfuerzos y realizar cambios urgentes para abordar esta terrible realidad que afecta los derechos de las mujeres, así como la paz social y la democracia en Honduras.
El informe detalla que durante el mes de marzo de 2024 se registraron 26 muertes violentas de mujeres, elevando el total de femicidios en lo que va del año a 66 hasta el 31 de marzo. Alarmantemente, cinco de los casos involucraron el rapto y la tortura previa al femicidio.
Los datos también revelan una distribución geográfica preocupante, con casos reportados en diversas regiones del país, destacando siete casos en Francisco Morazán y seis en Cortés, entre otros. La mayoría de las muertes se producen por arma de fuego, seguidas por armas blancas, evidenciando la gravedad y diversidad de los métodos utilizados para cometer estos crímenes atroces.
Ante esta situación, la ONU hace un llamado a las autoridades hondureñas para redoblar esfuerzos en garantizar la seguridad y protección de las mujeres, implementando medidas efectivas para prevenir y erradicar la violencia de género en todas sus formas.
