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Tegucigalpa, Honduras
Juan Orlando Hernández, presidente electo de Honduras, anunció hoy a su llegada al país tras sus vacaciones de Fin de Año en Estados Unidos que creará un fondo social para erradicar de la pobreza a más de 800,000 mil hondureños.
También pidió que no le pidan que nombre a personal en el servicio exterior sin ser evaluado. «Por favor no se me acerquen a pedir que nombre a personas que no pasen por el proceso que la ley ya dice. No quiero que perdamos la amistad. Así que apeguemos a los procesos que vendrán para tener un servicio exterior de primera», dijo Hernández.
Hernández anunció que en las embajadas y consulados de Honduras habrá una persona representante del programa Pro-Honduras, que tendrá como obligación ofrecer información a futuros inversionistas sobre las oportunidades que tiene el país para invertir.
El nuevo presidente señaló que ya comenzó a trabajar para tener un fondo social que le permitirá atender a las 800,000 familias más pobres de Honduras con los proyectos de Vida Mejor, Bono 10 Mil, entre otros. «Prácticamente estamos listos».
«Hay hambre y no hay trabajo»: el clamor de los pobres en Honduras.
«Yo esperaría que el Congreso Nacional apruebe en los próximos días un presupuesto balanceado que nos permita disponer de 4,000 millones de lempiras, los recursos de la cooperación internacional, también vamos a acceder a los recursos de la cooperación privada internacional como apelaremos a la Responsabilidad Social Empresarial en el país».
Para lograr este fondo social Hernández señaló que ya solicitó apoyo al cardenal hondureño de la iglesia Católica, Óscar Andrés Rodríguez, así como líderes de la iglesia Evangélica para realizar alianzas que permitan ayudar a las personas pobres.
«Hay un sector de Honduras que sólo conoce la Honduras en que ellos viven, pero hay otra Honduras en la que la gente vive en casas donde las paredes son de plástico, el techo de cartón, no tiene ni letrina ni baño, el piso es de tierra y viven con menos de 20 lempiras al día «.
«Mi compromiso es atender a esa gente. Estamos en la obligación de ayudar al pobre», finalizó el presidente electo a su llegada a Tegucigalpa.