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Las denuncias de violaciones a los derechos humanos, atribuidas a agentes del orden durante el estado de excepción, continúan siendo una constante según reportes recopilados por el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH).
Daniel Cáceres, director del observatorio del CONADEH, ha revelado que la institución ha recibido numerosas denuncias de ciudadanos por presuntas violaciones a los derechos humanos perpetradas por miembros de la policía, incluyendo a agentes de la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO), así como otros funcionarios del orden, durante el estado de excepción.
Cáceres señaló que se han presentado cerca de 500 quejas contra agentes del orden durante la vigencia del estado de excepción, principalmente relacionadas con actividades coercitivas. Se ha observado un patrón de abuso, donde agentes policiales, amparados por el estado de excepción, realizan allanamientos nocturnos sin pruebas sólidas y, en algunos casos, con evidencia presuntamente falsa.
El Ministerio Público ha procedido a la detención de policías involucrados en estas prácticas abusivas, corroborando así las denuncias presentadas ante CONADEH.
Las quejas recibidas por CONADEH abarcan el uso desproporcionado de la fuerza durante allanamientos, daños a la propiedad privada, acusaciones sin pruebas sólidas y manipulación de evidencia.
En este contexto, CONADEH hace un llamado a la derogación del estado de excepción y a la implementación de controles efectivos sobre las acciones de los policías y otros actores de la justicia. Se destaca la necesidad de supervisión por parte de mandos superiores para garantizar que las actuaciones policiales se desarrollen dentro del marco legal y en respeto a los derechos fundamentales de las personas.
