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Japón fue tachado de ingenuo cuando salió de la Copa del Mundo hace cuatro años contra Bélgica. Ahora, sus astutas tácticas han sorprendido a Alemania y España y los han llevado a los octavos de final.
El Samurai Azul se enfrentará a Croacia en la primera ronda eliminatoria el lunes después de encabezar el Grupo E con dos impresionantes victorias sobre los pesos pesados europeos.
Japón parecía muerto y enterrado cuando se quedó atrás en ambos juegos, pero el entrenador Hajime Moriyasu ayudó a cambiar el rumbo con sus sustituciones y cambios tácticos.
La capitana Maya Yoshida le dio crédito al plan de juego de contraataque de Moriyasu por su éxito y respondió a las percepciones de que Japón carece de la inteligencia para competir en el escenario mundial.
«Estás sorprendido, ¿verdad?» preguntó a los periodistas después del partido.
«No estamos sorprendidos. Usted está sorprendido».
Japón fue eliminado en los octavos de final hace cuatro años en Rusia después de desperdiciar una ventaja de dos goles para perder 3-2 ante Bélgica.
El creador de juego Keisuke Honda fue castigado por lanzar un córner de último minuto al área con el juego en equilibrio 2-2, después de que Bélgica ganó el balón y corrió hacia el otro lado para anotar.
La historia de desamor tardío de Japón es más profunda que eso, ya que un gol de Irak en el último minuto le negó el debut en la Copa del Mundo en 1994 en su último partido de clasificación en la capital de Qatar, Doha.
El partido se conoce en Japón como la «Tragedia de Doha», pero Moriyasu dijo que la victoria sobre España demostró que esos días quedaron atrás.
«Alrededor de un minuto antes del final del partido, pensé en la ‘tragedia de Doha'», dijo Moriyasu, cuyo equipo habría sido eliminado si España hubiera empatado.
«Pero exactamente en ese momento, los jugadores fueron por el balón con agresividad y pude sentir que los tiempos habían cambiado.
«Los jugadores están jugando una nueva era de fútbol ahora».
– Presencia tranquila –
Moriyasu dijo que su plan era tratar de mantener a España sin goles hasta el medio tiempo y luego traer delanteros rápidos y directos para golpearlos en el contraataque.
España dejó caer una mosca en el ungüento cuando Álvaro Morata les dio una ventaja temprana, pero Japón se negó a entrar en pánico y llegó al intervalo solo un gol por detrás.
Moriyasu incorporó a Ritsu Doan y Kaoru Mitoma en el medio tiempo y la pareja causó estragos en la defensa española, combinándose para poner a Japón por delante a los pocos minutos de la reanudación.
Yoshida dijo que las opciones de ataque a disposición de Moriyasu significan que nunca se puede descartar a Japón.
«En la segunda mitad, ambos equipos estaban tomando más riesgos y se abre espacio atrás», dijo.
«Incluso para los buenos centrales, si los jugadores rápidos atacan grandes espacios siempre es difícil. Ese era nuestro plan y teníamos que defender bien porque su posesión era muy buena».
Las victorias de Japón sobre Alemania y España contrastaron fuertemente con su derrota por 1-0 ante Costa Rica, donde lucharon para doblegar a los oponentes defensivos que les dieron la iniciativa.
Moriyasu fue criticado por ser demasiado cauteloso contra un equipo de Costa Rica que había perdido 7-0 ante España en su partido anterior, pero el entrenador insistió en que no cambiaría su enfoque.
Moriyasu ha hecho hincapié en la necesidad de que sus jugadores mantengan la calma en Qatar, instándolos a no «montarse en la montaña rusa» de las emociones.
El defensa Yuto Nagatomo dijo que el comportamiento del entrenador transmite tranquilidad a los jugadores.
«Incluso si España tenía mucha posesión, teníamos que asegurarnos de no ponernos negativos o nerviosos», dijo.
«Moriyasu nos dijo que definitivamente tendríamos oportunidades en el contraataque y le creímos.
«El entrenador no titubeó. Y si el entrenador no titubea, los jugadores tampoco».
