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El directivo de la Central General de Trabajadores (CGT), Benjamín Vásquez, expresó su preocupación hoy al señalar que, desde la instalación de la mesa negociadora del salario mínimo, no se han realizado nuevas convocatorias para avanzar en los acuerdos necesarios.
Vásquez, representante del sector obrero, destacó que, según la ley, corresponde al Poder Ejecutivo realizar las convocatorias pertinentes para este proceso, pero lamentablemente esto no ha ocurrido.
El dirigente sindical recordó que el nuevo salario mínimo debía entrar en vigor desde enero, sin embargo, al llegar febrero, aún no se ha convocado a las partes involucradas.
«Ya contamos con una propuesta, solo falta que seamos convocados para escuchar a la otra parte, en este caso, el sector privado», afirmó Vásquez.
Asimismo, acusó al poder Ejecutivo de dilatar todas las convocatorias, ya que la ley establece ciertos plazos que no se han cumplido a tiempo.
Ante esta situación, Vásquez instó a las autoridades gubernamentales, a través de la Secretaría del Trabajo y Seguridad Social, a no dilatar el proceso y convocar a la siguiente reunión con prontitud.
La mesa negociadora se estableció a principios de enero y, desde entonces, no se ha vuelto a convocar a las partes, generando preocupación en el sector obrero.
Las bases para la negociación se sustentan en la tasa de inflación del año pasado, que cerró en cinco puntos, y habitualmente se solicita un aumento adicional de tres puntos al salario base.
Sin embargo, las negociaciones varían según los distintos rubros y el tamaño de las empresas, considerando tanto a las microempresas como a las grandes corporaciones. Además, se toma en cuenta la ubicación geográfica de las empresas, negociando un salario mínimo diferenciado para las zonas rurales y urbanas.
