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La importancia estratégica de definir las fronteras terrestres, insulares y marítimas de Honduras con Nicaragua, que le permite acceso directo al Océano Pacífico, no ha sido suficiente para el Poder Legislativo, que no ha podido aprobar el Tratado Bicentenario que le permitiría al país resolver sus problemas limítrofes con un vecino clave.
– A pesar de ser un tratado estratégico para Honduras, las bancadas del Congreso Nacional no se ponen de acuerdo para un logro histórico del país.
A los 128 diputados de la actual legislatura solo les queda el último día de actividad, este jueves, para dar el paso crucial que conduzca a la aprobación del referido Tratado de Límites en el Caribe y el Golfo de Fonseca, Suscrito el 27 de octubre del 2021 entre los mandatarios Daniel Ortega de Nicaragua y Juan Orlando Hernández de Honduras.
Nicaragua firmó el convenio y al día siguiente de su suscripción la Asamblea Nacional lo aprobó, con lo cual el gobierno de Ortega tiene vía libre para hacer el depósito del mismo ante la Secretaría General de las Naciones Unidas y con lo cual quedaría ratificado.
Pero el Congreso Nacional de Honduras no ha podido lograr reunir la voluntad de las diversas bancadas que permitan la aprobación del mismo, ya que se requiere de mayoría calificada.
El presidente Hernández, el Consejo Hondureño de la Empresa Privada y otros sectores han llamado a los diputados a que aprueben el referido tratado, pero a falta de que este jueves concluya el mandato de los legisladores, estos no han podido hacer su trabajo por el bien de Honduras.
El gobernante hondureño, que la próxima semana entrega su mando a la presidenta electa Xiomara Castro, llamó a los diputados a que den el último respaldo al tramo del llamado tratado del Bicentenario.
“Pido a los diputados del Congreso Nacional que le den ese respaldo en el último tramo de procesos el acuerdo firmado con Nicaragua”, dijo Hernández.
“Hay dos sentencias de la Corte Internacional de Justicia de La Haya, donde dice que se le reconoce a Honduras esa salida al Pacífico y luego de muchos años de trabajo acordamos con Nicaragua que a partir de las 3.68 millas ahora también son el derecho reconocido a Honduras y que siempre habíamos tenido”, puntualizó el mandatario.
La Corte Internacional de Justicia resolvió el conflicto limítrofe insular, terrestre y marítimo con El Salvador, del cual Nicaragua participó como parte interesada en referencia al Golfo de Fonseca, el 11 de septiembre de 1992, y en la misma reconoció el derecho hondureño a una salida soberana al Océano Pacífico.
Tras casi 30 años de la sentencia, Nicaragua finalmente aceptó y en la firma del Tratado Integracionista del Bicentenario concede a Honduras lo dictado por los jueces de la Corte. Pero los logros diplomáticos del país no pueden ser reclamados porque los diputados no aprueban el mismo, a fin que el documento sea ratificado y posteriormente depositado en las Naciones Unidas para que tenga carácter de obligación internacional.
De su lado el Cohep instó a los diputados a que con el sentido de urgencia aprueben dicho tratado.
El Salvador lo rechaza
El gobernante hondureño espera que El Salvador en algún momento se siente a hablar del tema.
Pero el gobierno salvadoreño, por medio del Ministerio de Relaciones Exteriores, manifestó “su pleno rechazo al tratado” porque según su tesis contraviene el derecho internacional, especialmente la sentencia de la Corte Internacional de Justicia, ya que estiman que la misma señala que todo lo relacionado al Golfo de Fonseca y las aguas afuera del mismo “ha de ser efectuada por los tres Estados”.
Asimismo, el gobierno salvadoreño no acepta que el Tratado Bicentenario suscrito por Honduras y Nicaragua “genere efectos jurídicos”, porque a su juicio el mismo contiene evidentes juicios de nulidad al “pretender crear de manera ilegítima” obligaciones para el Estado salvadoreño “sin su conocimiento ni su consentimiento”.
Igualmente el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores señala que “no existe aquiescencia salvadoreña en una eventual delimitación en el Océano Pacífico, en virtud de dicho Tratado”.
De hecho El Salvador no solo cuestiona el tratado con Nicaragua, sino parte de la misma sentencia de La Haya al hacer reclamos sobre la soberanía de la isla Conejo, la misma que incluso no estuvo en disputa en la controversia fronteriza.
Ausencia de diputados
Para la aprobación del referido tratado, el secretario del Congreso Nacional, Tommy Zambrano, dijo que se requieren 96 votos, tres cuartas partes de los 128 diputados que integran el Poder Legislativo.
Los dirigentes del Congreso Nacional habían señalado que aprobarían a inicios de semana el tratado, pero ahora solo queda este jueves, ya que el viernes se instala la nueva legislatura salida de las elecciones de noviembre del 2021.
Zambrano indicó que la ausencia de los diputados de Libre en las sesiones legislativas impide la aprobación del mismo. La inasistencia de los legisladores de Libre impide llegar a los 96 votos necesarios.