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Tegucigalpa, Honduras.
Satisfechos salieron el miércoles, directivos del Consejo Coordinador de Organizaciones Campesinas de Honduras (Cococh), con las explicaciones que les ofreció el presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, en una reunión que sostuvieron en su despacho donde se les explico los esfuerzos estatales para contrarrestar los efectos negativos de la sequía en la producción nacional.
Al salir de la reunión, el secretario general del Cococh, Santos Caballero, indicó que el objetivo de la reunión con el titular del Legislativo, era dialogar acerca del problema de la sequía que afecta a los productores del campo y las coordinaciones entre el Congreso Nacional y el Poder Ejecutivo para echar a andar los proyectos de riego que se necesitan en este momento.
Añadió que Oliva les explicó que ya ha sostenido pláticas con el presidente de la República, Juan Orlando Hernández, para establecer de qué manera se van a impulsar esos proyectos de riego en mediana y pequeña escala para lo cual se deben hacer estudios previos.
También se habló acerca de la mecánica para poder acceder a los fondos de mil 500 millones de lempiras que el gobierno ha puesto a disposición de los productores del campo a través del Banco Hondureño para la Producción y la Vivienda (Banhprovi).
Añadió que el próximo sábado se reunirán con el ministro de Desarrollo Económico, Alden Rivera, quien les brindará mayores detalles acerca del mecanismo para acceder a los fondos. “El presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, está optimista de que tenemos que levantar este país, más que todo en la producción agrícola que es tan necesaria en este país”, aseveró Caballero.
Agregó que continuará reuniéndose con el titular del Legislativo cuando así se estime conveniente e ir evaluando los planes de trabajo.
Por su lado, el asesor técnico del Cococh, Francis David Fúnez, indicó que en la reunión con Oliva fundamentalmente trataron el tema de la sequía que es un fenómeno recurrente que nadie se había puesto a resolver ese problema estructural y el sector organizado de los productores, están dispuestos a comprometerse ya sea con el gobierno o con la cooperación internacional a un proceso para resolver el problema de una vez por todas mediante sistemas de riego.
“Nosotros estamos dispuestos a que los campesinos aporten la mano de obra y materiales locales y que el gobierno y la cooperación internacional pongan los recursos que no tenemos como las bombas, las represas, las tuberías y los rollos para goteo para levantar este país”, señaló.
Puntualizó que están convencidos de que el día que se logre regar Honduras, el país no solamente volverá a ser el granero de Centroamérica, sino el proveedor de granos y comida para Latinoamérica y por eso se debe ser agresivo y creativo en ese aspecto.