Comayagua, Honduras.
Las calles de Comayagua maravillan una vez más a los turistas nacionales y extranjeros nuevamente esta Semana Santa.
Sus habitantes dan muestra de su arte y devoción con la tradicional elaboración de las alfombras de aserrín que lleva ya más de medio siglo en esa ciudad colonial.
Más de 50 tapetes cubren las principales arterias recordando a los visitantes la Pasión de Jesús, su sacrificio al morir en la cruz y el milagro glorioso de su resucitación.
Grupos católicos, autoridades municipales y civiles, familias de la ciudad y la empresa privada se unieron para elaborar las alfombras que atraen a miles de turistas anualmente. Una de las alfombras más llamativas y con un mensaje primordial fue la que elaboró el movimiento católico evangelizador de parejas y matrimonios Camino.
César Zepeda, coordinador de Camino en Comayagua, dijo que en la elaboración de esta alfombra participaron más de 90 personas.
Estudiantes, maestros y empleados de la Biblioteca trabajaron durante dos meses en la planificación de la elaboración de las alfombras y llevarlas a la calle.
Además de aserrín, utilizaron arroz, sal, diamantina para el manto de Jesucristo, de manera que el tapete lucía espectacular.