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Está claro que Tom Holland no necesita su traje de Spidey para ser el héroe más amigable del vecindario.
En una nueva entrevista para la historia de portada del próximo número Best Dressed de InStyle, Zendaya reveló lo que más aprecia de Tom como actor, y tal vez incluso más.
«Hay muchas cosas, obviamente, que aprecio», le dijo la actriz de Spider-Man: No Way Home al medio. «Desde el punto de vista del actor, aprecio que realmente le guste ser Spider-Man. Es mucha presión, asumes el papel de un superhéroe dondequiera que vayas. Para el niño pequeño que pasa, eres Spider-Man. Yo creo que lo manejó muy bien».
La estrella experta en moda, que también es Virgo para saberlo de primera mano, agregó en broma, «Y al verlo en el trabajo, aunque no es Virgo, es un perfeccionista».
El dúo compartió por primera vez la pantalla grande como coprotagonistas en la película de 2017, Spider-Man: Homecoming. Y aunque han pasado cuatro años desde que Tom comenzó a ponerse el famoso traje de superhéroe rojo y azul, Zendaya también dejó claro que la ética de trabajo de su coprotagonista no se ha ralentizado en absoluto, y que el perfeccionismo es algo que realmente admira.
«Nuestro director me permitió entrar todos los días [del rodaje]», explicó. «Y fue genial ver cómo se preocupa tanto por su trabajo y por hacerlo bien. Lo vi hacer una escena de pelea todo el día, lo cual es agotador. Hacía un movimiento, regresaba a los monitores, lo miraba, y decía, ‘Puedo hacerlo mejor’. Yo estaba como, ‘Amigo, lo tienes’. Pero él quiere que seamos perfectos, y realmente lo aprecio».
Es seguro decir que los dos, quienes enviaron ondas de choque alrededor de nuestro universo real cuando fueron vistos besándose a principios de julio y han demostrado que tienen una relación muy fuerte desde entonces, disfrutan estar uno al lado del otro. Como le dijo Zendaya al medio, Tom es «muy divertido».
«Muy carismático», agregó. «[Él] puede hacer que cualquiera se sienta cómodo y se ría mucho y tener una buena charla. Una buena charla, sueno tan británica».
Claramente, las cosas entre los dos continúan elevándose a nuevas alturas.