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Durante el juicio por narcotráfico que se lleva a cabo en la Corte del Distrito Sur de Nueva York contra el expresidente Juan Orlando Hernández, el testigo de la Fiscalía José Sánchez, alias «El Contador», hizo impactantes declaraciones implicando a los expresidentes Manuel Zelaya Rosales y Porfirio Lobo en actividades relacionadas con el narcotráfico.
Según Sánchez, ambos expresidentes recibieron dinero del narcotráfico en 2005. Además, Sánchez afirmó haber presenciado acciones del expresidente Juan Orlando Hernández y otros poderosos políticos hondureños vinculados a la narcoactividad.
El testimonio de José Sánchez, quien fue contador de Geovanny Fuentes Ramírez, un narcotraficante ya condenado, es particularmente relevante ya que no enfrenta cargos en tribunales estadounidenses. Sánchez afirmó haber visto cuando Fuentes entregó un maletín de dinero a Juan Orlando Hernández, destinado para su campaña política.
Sánchez también detalló cómo la empresa «Graneros Nacionales» entregó dinero a los expresidentes Zelaya y Lobo durante las elecciones generales de 2005 y 2009 respectivamente, así como la participación de diversos políticos hondureños en conversaciones y transacciones con Fuentes Ramírez.
Además, Sánchez mencionó un encuentro entre Fuentes y un oficial apellidado Sauceda, quien habría entregado uniformes y equipos a Fuentes Ramírez. Esta revelación se suma a una fotografía mostrada durante el juicio, en la que aparece Juan Orlando Hernández con dos hijos de Fuentes Ramírez.
Estas acusaciones amplían aún más el alcance del escándalo de narcotráfico que rodea al expresidente Juan Orlando Hernández y plantean serias interrogantes sobre la presunta implicación de otros líderes políticos hondureños en actividades ilegales.
