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Pero no le duró mucho la travesía a Tareena, quien fue detenida por la policía británica en el aeropuerto de Heathrow, en febrero de 2015, después de llegar en un vuelo proveniente de Turquía.
En el primer día del juicio en Birmingham, los miembros del jurado escucharon diferentes mensajes que la ex estudiante universitaria envió a sus amigos y familiares en el Reino Unido sobre su experiencia como yihadista de ISIS.
«Si no aman a ISIS, no quiero hablar más con ustedes», le reprochó en una oportunidad a sus padres. «Yo puedo salir, pero no quiero. Me quiero morir aquí como mártir», le escribió a su padre.
La joven también envió fotos de ella y su pequeño hijo con un rifle AK-47, en las que aseguraba que el bebé de poco más de un año ya había aprendido a decir «Allahu Akbar» (‘Dios es grande’).
Los fiscales también alegaron que Tareen estaba casada, o dispuesta a casarse, con un terrorista del Estado Islámico durante su estadía en Siria. Asimismo, fue acusada de haber utilizado las redes sociales para incitar actos de terrorismo.
Sin embargo, frente al tribunal la joven negó ser miembro de ISIS y denunció que fue secuestrada en Turquía y llevada a Siria después de tener «una historia de amor» con un hombre llamado Ahmed, consigna Daily Mail.
El fiscal de la causa informó que Tareena abandonó Siria y regresó al Reino Unido a principios de enero de 2015.
Ella envió un mensaje de WhatsApp el 7 de enero en el que decía que estaba «volviendo a casa» y que estaba en Turquía.
Finalmente fue detenida el 18 de febrero de 2015 cerca de las 20:20 cuando los agentes abordaron el vuelo CT 1985 de Turkish Airlines en el aeropuerto Heathrow de Londres.