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En una inesperada pausa en el proceso judicial, el juicio por difamación contra el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, que enfrenta acusaciones de la escritora E. Jean Carroll, ha sido pospuesto hasta nuevo aviso.
La interrupción se produjo hoy después de que se confirmara que uno de los nueve jurados estaba enfermo.
Tanto Carroll como Trump estaban presentes en la sala cuando el juez Lewis Kaplan tomó la decisión de cancelar la sesión del día.
Además, todos los jurados se someterán a pruebas de COVID-19 durante el día, después de que la abogada de Trump, Alina Habba, informara que estuvo en contacto con sus padres, quienes luego dieron positivo en las pruebas de coronavirus. A pesar de tener fiebre y no llevar mascarilla, Habba dio negativo esta mañana.
La abogada de Trump expresó al juez que el expresidente desea testificar en el juicio, pero no estará disponible el martes debido a las primarias republicanas en New Hampshire, una fecha clave en el proceso electoral.
El juez Kaplan no tomó una decisión inmediata sobre la posibilidad de que Trump testifique el miércoles y tampoco aclaró si las audiencias se reanudarán mañana.
En el juicio, Trump enfrenta acusaciones de difamación por parte de Carroll, quien sostiene que el expresidente mintió en 2019 al afirmar que no la conocía y que sus acusaciones de abuso sexual eran falsas. El pasado mayo, un jurado ya condenó a Trump por abuso sexual y difamación, imponiéndole el pago de 5 millones de dólares.
Ahora, el jurado deberá decidir si las declaraciones de Trump en 2019 dañaron la reputación de Carroll, y en caso afirmativo, determinar las sanciones económicas correspondientes.
Carroll busca una compensación de 10 millones de dólares, argumentando que esta cantidad es insuficiente en comparación con los 12.1 millones de dólares que, según un experto contratado por su equipo legal, costaría restaurar su buena reputación y credibilidad.
La escritora afirma haber perdido credibilidad como columnista y haber experimentado acoso por parte de seguidores de Trump desde que hiciera públicas las acusaciones.
Mientras tanto, la defensa de Trump sostiene que la carrera de Carroll ya estaba declinando antes de que él negara las acusaciones en 2019, y que, paradójicamente, las acusaciones contra Trump revitalizaron su popularidad.
Además, argumentan que los mensajes amenazadores que Carroll recibió en redes sociales fueron el resultado de acusar a Trump, no de la respuesta del expresidente. La disputa judicial continúa, ahora a la espera de la recuperación del jurado y la evolución de la situación sanitaria.
