La Universidad de Pensilvania realizó un estudio donde se le presentó a un grupo de féminas las fotografías de 59 hombres (unos con cabello y otros calvos) para luego revelar cuales eran los más atractivos.
Según los resultados la falta de cabello denotaba madurez y trasmitía más experiencia e inteligencia.
Para la mayoría de las encuestas los hombres calvos son más dominantes; por lo tanto, al momento de la conquista tienen más posibilidades que los hombres que aún conservan todo su pelo.