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El Banco Central de Honduras (BCH) anunció hoy que la inflación en febrero se situó en un modesto 0.68%, marcando una ligera disminución en comparación con el mismo período del año anterior.
A pesar de los incrementos en el sector educativo, que representaron aproximadamente el 71.0% del total, la inflación se mantuvo 0.48 puntos porcentuales por debajo de la observada en 2023, cuando alcanzó el 1.16%.
La educación secundaria encabezó la lista de contribuyentes al aumento de precios, seguida de cerca por la primaria y la educación superior. Otros sectores que también tuvieron un impacto significativo en la inflación fueron el alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles, así como los hoteles, cafeterías y restaurantes.
El informe del BCH señaló que estos aumentos fueron contrarrestados en parte por la caída de precios en el transporte y los alimentos y bebidas no alcohólicas.
En particular, la disminución de precios en productos agrícolas, lácteos y productos cárnicos contribuyó a reducir la inflación mensual en 0.07 puntos porcentuales.
En cuanto a la inflación interanual, el índice se situó en un 4.5%, la cifra más baja desde agosto de 2021. Esta tasa es significativamente menor en 5.30 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del año anterior, cuando alcanzó el 9.8%.
Además, en lo que va del año se ha registrado una tasa acumulada del 0.92%, la más baja en los últimos tres años.
El BCH atribuyó en parte este control de la inflación a las medidas de política económica implementadas por el gobierno, que han reducido la inflación interanual en aproximadamente 1.56 puntos porcentuales, situándola en el 4.5%. Sin estas medidas, la inflación habría alcanzado el 6.06%.
Estos resultados sugieren una gestión prudente de la política económica por parte de las autoridades hondureñas, que han logrado mantener la inflación bajo control en medio de un panorama económico desafiante.
