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El expresidente de Honduras, Porfirio Lobo Sosa, ha emitido una respuesta contundente ante las recientes declaraciones de su hijo, Fabio Lobo Lobo, quien testificó en el juicio contra Juan Orlando Hernández, generando revuelo en la opinión pública.
Lobo Sosa rechazó rotundamente el testimonio de su hijo, calificándolo como «tonterías» dichas por «uno más de los delincuentes» que están declarando en la corte de Nueva York.
En su declaración, el exmandatario compartió su desconcierto ante la situación, destacando que, aunque Fabio es su hijo, sus palabras son falsas y perjudiciales. Lamentó la falta de comunicación con él desde hace aproximadamente una década y recordó haberle advertido sobre las compañías que frecuentaba.
El expresidente enfatizó que continuará apoyando a sus nietas, hijas de Fabio, pero reiteró su decisión de mantenerse alejado de cualquier relación con su hijo en el futuro. Además, reafirmó su compromiso con la verdad y su disposición a enfrentar cualquier investigación que se le presente.
Porfirio Lobo Sosa concluyó su declaración rechazando las acusaciones y destacando que quien comete delitos debe enfrentar las consecuencias por sí mismo, una lección que aprendió de su propio padre y que ha guiado su actuar durante estos difíciles momentos.
