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La federación de fútbol de El Salvador ordenó el martes que la primera división de Alianza juegue partidos en casa a puerta cerrada durante un año, culpando al club por una estampida fatal en su Estadio Cuscatlán.
Doce personas murieron y cientos resultaron heridas en la aglomeración del sábado que se cree que comenzó cuando cayó una puerta en el estadio de la capital, San Salvador.
“La responsabilidad de los hechos ocurridos en el Estadio Cuscatlán durante el desarrollo del partido de fútbol es atribuible (a Alianza) por ser el equipo de la casa, y por lo tanto, organizador del partido”, dijo un fallo de la comisión disciplinaria de la federación de fútbol.
Alianza deberá jugar «sin la asistencia de espectadores locales por un período de un año» y pagar una multa de 30.000 dólares antes del 21 de julio.
El fallo también declaró al equipo visitante, FAS, ganador del partido, que había sido suspendido.
Además de los 12 muertos, unas 500 personas fueron atendidas por diversas lesiones en el lugar, mientras que 88 fueron hospitalizadas. La mayoría han sido dados de alta desde entonces.
El fallo consideró que Alianza «no adoptó medidas conducentes a prevenir los hechos, o lo hizo de manera negligente».
Las medidas de seguridad y el control de acceso al estadio «fueron evidentemente insuficientes y deficientes».
Dijo que Alianza no presentó un informe propio como lo solicitó la comisión disciplinaria porque ya estaba cooperando con una investigación de las autoridades locales.
