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No cesa en el Real Madrid el culebrón en torno a Gareth Bale de 30 años, se rumora que en el club ya contemplan su salida en la ventana de traspasos de invierno. En la dirección deportiva blanca circula esta idea que, dados los planes del futbolista, podría materializarse en los meses que vienen.
Este escenario no es desconocido por el vestuario, donde asisten en primera fila a la delicada posición del de Cardiff. Saben que en la última semana se ha tensado especialmente la situación, con algún incidente puntual entre su compañero y sus superiores.
No ha ayudado en las últimas fechas que Gareth regresara lesionado del parón FIFA. El galés, en cualquier caso, no está a gusto ni con el club ni con Zidane. De la entidad le molestó que no aceptase una oferta que él si estaba dispuesto a dar por buena en verano y del entrenador, entre otras cosas, que le dejara fuera de la convocatoria ante el Brujas.
Por su problema físico más reciente, Bale no ha estado disponible ante el Mallorca ni el Galatasaray. Tampoco se le espera contra el Leganés, el miércoles en el Santiago Bernabéu. Sobre todo, después de que se haya desplazado a Londres este lunes, tras ejercitarse en el interior de las instalaciones en Valdebebas.
En ese sentido, El galés, que ya estuvo más fuera que dentro en verano, parece estarlo también para el próximo enero.