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La terapia MBST o resonancia magnética terapéutica, utiliza la base tecnológica de la resonancio magnética diagnóstica, pero con una finalidad curativa.
¿Qué es la terapia MBST?
El tratamiento con resonancia magnética, conocido como Resonancia Magnética Nuclear Terapéutica o, por las iniciales en alemán de la técnica patentada, MBST (Multi-Bio-Signal-Therapie), es un método disponible desde hace unos pocos años para el tratamiento de procesos osteoarticulares benignos.
Médicos alemanes identificaron a finales del siglo XX que en aquellos pacientes que se hacían una resonancia magnética (RM) en repetidas ocasiones para el diagnóstico y el seguimiento de sus enfermedades del aparato locomotor, estos pacientes mostraban una mejoría en su estado de salud y en los síntomas derivados de las enfermedades por las que se hacían la RM.
¿En qué consiste la terapia MBST?
La RM terapéutica utiliza la base tecnológica de la RM diagnóstica, pero con una finalidad curativa. La RM tradicional (diagnóstica) utiliza campos magnéticos y ondas de radiofrecuencia para excitar los núcleos de hidrógeno de las células de nuestro organismo. Esto crea una energía en la célula durante el pulso de resonancia (impulso), que se libera cuando cesa el pulso y que se utiliza para generar imágenes.
La RM terapéutica o terapia MBST utiliza el mismo principio tecnológico, y así, cuando cesa el pulso, se transfiere la energía a las células adyacentes. Esta transferencia directa de energía se produciría únicamente a las células dañadas y tendría como objetivo desencadenar procesos antiinflamatorios, analgésicos y regenerativos de las células dañadas y, con ello, mitigar el dolor, reducir la inflamación y mejorar su funcionalidad.
El proceso de energía con cada pulso emitido se repite durante todo el tiempo que dura la sesión clínica.
En estudios de laboratorio, con esta técnica se han conseguido los siguientes efectos:
- Incremento del cartílago y aumento del recuento celular en cartílago y hueso
- Disminución de los procesos de inflamación
- Generación, activación y reclutamiento de osteocitos para acortar tiempos de recuperación y mejora de la remodelación ósea
- Acción beneficiosa sobre los fibroblastos y proteínas produciendo mecanismos de reparación
- Estimulación de osteocitos y de células antiinflamatorias para disminuir el edema
- Activación de los osteoblastos e inhibición de los osteoclastos del hueso.
Proceso y preparación del paciente para el tratamiento
- El tratamiento es simple. Es como si la persona se fuese a hacer una RM convencional. No hay que hacer pinchazos ni poner medicación intravenosa, ni dar medicamentos orales ni calmantes.
- El dispositivo de RM es abierto y, por lo tanto, no causa ninguna sensación de claustrofobia.
- El tratamiento completo suele ser entre siete y nueve sesiones, en función de la localización, gravedad y tipo de lesión, y cada sesión suele ser de una hora.
- La RM terapéutica se puede hacer combinada con sesiones de fisioterapia. La combinación de la RM terapéutica y la fisioterapia hace que el tratamiento tenga una más alta efectividad.
Ventajas de la resonancia magnética terapéutica
- Es un tratamiento indoloro.
- Buena tolerancia durante la sesión de tratamiento.
- No tiene efectos secundarios.
- Los efectos son duraderos en el tiempo (hasta 4 años).
- No causa ninguna sensación de claustrofobia.
- No tiene riesgos.
- No hay que administrar fármacos ni por vía oral ni por vía intravenosa.
Indicaciones de la RM terapéutica
De forma muy resumida, podemos decir que las indicaciones, a día de hoy, son las enfermedades degenerativas del aparato locomotor en adultos. Esto incluye cualquier dolor de la espalda y de las articulaciones debido a artrosis, condropatías y hernias discales.
El tratamiento sólo es efectivo en personas con articulaciones lesionadas.
De forma más detallada, la RM terapéutica se podría utilizar en los siguientes problemas médicos:
- Daños en el cartílago (condropatías) de las articulaciones de rodillas, caderas, tobillos, pies, hombros, codos, manos y muñecas.
- Hernias y protrusiones discales, y otras patologías degenerativas de la columna cervical, dorsal o lumbar, incluyendo estenosis del canal foraminal, síndromes facetarios y espondilolisis vertebral.
- Edema óseo.
- Lesiones musculares, de ligamentos y de tendones.
- Fracturas y fisuras de huesos largos, y aplastamientos vertebrales.
- Fracturas óseas por estrés.
- Postoperatorios de colocación de prótesis.
- Curas y cicatrización de heridas.
- Dolores neuropáticos, incluyendo ciatalgias, cervicobraquialgias y neuralgias por compresión del nervio.
- Osteoporosis.
- Fibromialgia.
