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La bahía de Tela, ubicada en la costa norte de Honduras, cuenta con los arrecifes de coral más espectaculares del Sistema Arrecifal Mesoamericano (SAM). No solo tiene una gran cantidad de arrecifes, sino que posiblemente posee algunos de los arrecifes de coral más saludables del Sistema. Así lo expresó Antal Börcsök, director del Tela Marine Research Center.
El Sistema Arrecifal Mesoamericano (SAM) se extiende a lo largo de México, Belice, Guatemala y la costa norte de Honduras. Cuenta con una extensión de más de 1000 km de costas es el arrecife transfronterizo más grande del mundo y tiene el segundo arrecife de barrera más largo a nivel mundial.
Los arrecifes en Tela tienen un promedio de Cobertura de Coral Saludable del 70%, esto es de 4 a 5 veces la cobertura de coral en el resto del Arrecife Mesoamericano. Incluso, es probablemente que sea la Cobertura de Coral Saludable más alta de todo el Arrecife Mesoamericano.
Estos arrecifes tienen características especiales que impresionan hasta a los buceadores y científicos más expertos. Muchos los describen como magníficos, únicos, especiales y hasta raros.
La densidad de coral en Tela es tan inusual, que realizar estudios de arrecifes activos es un verdadero desafío. La mayoría de las técnicas de estudio fueron diseñadas para un arrecife típico donde las colonias de coral crecen en parches y se distinguen fácilmente una de la otra. Los arrecifes de Tela se describen mejor como “una alfombra de coral” donde a veces es imposible diferenciar donde empieza una colonia y donde termina otra.
En la bahía de Tela también hay colonias de coral enormes que pueden registrar una altura de 13 pies y circunferencias de 58 pies. Se estima que las colonias de coral de este tamaño tienen una antigüedad de 300 años, lo que significa que han sobrevivido a través de varios fenómenos humanos y naturales en sus vidas.
Aún no se conocen las razones que hacen que los arrecifes de corales en Tela sean tan particulares. Una de las características más obvias que podría contribuir a esta excepcional cobertura de coral es la abundancia de Diadema Antillarum, conocidos como erizos de mar negro.
El erizo de mar negro puede mantener hasta 1 metro cuadrado libre de algas y antes de 1983 solían ser uno de los animales más comunes en el Arrecife Mesoamericano. Sin embargo, hace unos 37 años, un patógeno desconocido devastó el atlántico occidental y en algunas áreas mató hasta el 99% de todos los erizos de mar negro.
Increíblemente, Tela todavía tiene una densidad de alrededor de 1.5 erizos de mar negro por metro cuadrado, considerando que la densidad promedio actual de diadema antillarum en el Arrecife Mesoamericano es de 1 por cada 100 m2. Los erizos de mar negro en Tela no solo mantienen el arrecife limpio de algas, sino que también tienen una densidad poblacional apta para su reproducción.
Los arrecifes de Tela también albergan la cobertura de coral Acropora Palmata más alta en el Arrecife Mesoamericano, la cual se cataloga como una especie en peligro de extinción. Esta especie de coral comúnmente conocida como “coral cuerno de alce”, solía dominar las aguas poco profundas del Caribe, pero a principios de la década de 1980 sus poblaciones han ido disminuyendo considerablemente y se ha perdido el 97% de este coral en el Arrecife Mesoamericano.
Otra característica destacable que se ha observado de los arrecifes de Tela es que estos son de alguna manera resistentes a muchos estreses mortales que afectan a los arrecifes de coral típicos de la zona. Esto aún debe ser estudiado a profundidad, pero podría deberse al agua rica en nutrientes de la bahía.
“Aquí tenemos un arrecife que ha apostado contra todas las probabilidades. Un arrecife con secretos que podrían ayudarnos a comprender las infinitas variables que contribuyen al rápido declive de los ecosistemas de arrecifes de coral en todo el mundo. Un arrecife que se niega a rendirse ante el cambio climático y los factores estresantes humanos. Un arrecife, que cuando todos los demás arrecifes se hayan rendido, bien podría ser el último arrecife en pie. Con suerte, superando todas las posibilidades en el futuro y asegurando las semillas de los arrecifes del mañana.” expresó Antal Börcsök, director del Tela Marine Research Center.
