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Adalid Irías, presidente de la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica de Honduras (Adecabah), ha expresado su preocupación ante el constante aumento en el precio de los combustibles, específicamente el diésel, y sus posibles efectos en el costo de los alimentos. Irías advierte que este incremento podría impactar los precios de los alimentos en un rango del 3 al 4 por ciento, generando inquietud entre los consumidores.
El galón de diésel ha experimentado un aumento de más de 3 lempiras, representando un incremento del 27.30 por ciento en ocho ocasiones consecutivas. Dado que el diésel juega un papel crucial en la economía del país, al impulsar diversos sectores como el transporte, la agricultura y la industria, Irías hace un llamado al Gobierno para que tome medidas con el fin de mitigar estas alzas.
El presidente de Adecabah también ha solicitado a la presidenta Xiomara Castro que se implemente un congelamiento en el precio del diésel, considerando que la tendencia de los incrementos continuará en las próximas semanas.
En la presente semana, en Tegucigalpa, el precio de la gasolina súper ha aumentado en 2.74 lempiras, alcanzando un valor de 113.13 lempiras por galón. En San Pedro Sula, el incremento es de 2.73 lempiras, situando el precio en 110.61.
Por su parte, el precio de la gasolina regular ha subido en 2.81 lempiras, llegando a un costo de 98.58 en la capital. En la ciudad industrial, el precio es de 96.8 lempiras debido al aumento de 2.80 lempiras.
El diésel, como insumo vital en varios sectores de la economía hondureña, ha experimentado un aumento de 3.32 lempiras en Tegucigalpa, estableciendo su nuevo precio en 92.62 lempiras. En la ciudad industrial, el incremento es de 3.30 lempiras, elevando el precio a 89.95.
Estas alzas en el precio del diésel no solo tienen implicaciones económicas, sino que también pueden tener un impacto en la vida cotidiana de los hondureños, afectando directamente el costo de vida y la estabilidad de diversos sectores productivos del país.
