Recibe actualizaciones en tiempo real directamente en tu dispositivo, suscríbete ahora.
Muebles viejos, partes de electrodomésticos, desechos clínicos, plásticos y basura en general, fueron retirados de la «Playa Grande», en Tela, Atlántida, para ser llevados al botadero público, después de varios meses tirados.
En el barrio Lempira comienza la «Playa Grande», una área que años atrás recibía a muchos bañistas, cuando no se atravesaba la actual problemática de contaminación, recordó el hotelero de la zona, Hugo Varela.
«Esta es la mejor playa de Tela, la Playa Grande aquí comienza y antes todo esto estaba en mejores condiciones», dijo el empresario mientras demandó a las autoridades mandar constantemente maquinaria para retirar los desechos.
Para que esa basura no siguiera en esa playa al cierre del año 2022, el regidor del Partido Salvador de Honduras (PSH), Enrique Nassar, organizó una jornada de limpieza el pasado fin de semana.
«Necesitamos hacerle conciencia al Pueblo, que ya no sigan con esa mala costumbre de venir a tirar basura. Hemos comenzado a trabajar para recuperar esta playa y vamos a hacerlo hasta que vuelva a ser como antes, limpia y bonita», aseguró.
Nassar, agregó para el año 2023 organizarán nuevas operaciones de limpieza, conjuntamente con la Comisión Permanente de Contingencias (COPECO), además voluntarios de la organización Amigos de los Arrecifes de Tela (AMATELA), empresarios y la ciudadanía en general.
El corporativo manifestó que la Municipalidad de Tela debe aplicar las ordenanzas ya aprobadas para prohibir el plástico de uso único, especialmente los empaques de comida, ya que gran cantidad de estos desechos terminan en las playas.
«Le hago un llamado a Salvador Nasralla (designado presidencial) para que vaya pensando que proyecto vamos a hacer para recuperar estas playas, en campaña prometió traer oficinas del Ministerio de Turismo, aquí tenemos las mejores playas de Centroamérica, pero debemos trabajar para recuperarlas», concluyó.
En los asuetos de diciembre y enero, tradicionalmente las familias teleñas y bañistas de ciudades cercanas llegan a las playas para refrescarse, especialmente el 01 de enero, para «recibir con los mejores ánimos el Nuevo Año».