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Tegucigalpa, Honduras.
Con el propósito de definir los lineamientos y principios básicos que deben desarrollar las instituciones de los sectores público y privado, así como las organizaciones sociales, para la ejecución de programas y acciones dirigidos a reducir el riesgo de desastres, garantizar mejores condiciones de seguridad de la población y proteger su patrimonio económico, social, ambiental y cultural se presentó hoy la actualización del Plan Nacional de Gestión Integral de Riesgos (PNGIRH), iniciativa que había iniciado hace algunos años con el apoyo de CEPREDENAC y el PNUD.
Este Plan viene a constituirse en el instrumento de gestión de la Política de Estado y cuenta con tres grandes enfoques de cobertura, un primer enfoque que es el de las instituciones de Sistema Nacional de Gestión de Riesgos SINAGER en sí y su Consejo Directivo, un segundo enfoque que es el nivel Sectorial y un tercer enfoque que es el Municipal.
En el segundo enfoque, se encuentran las instituciones del gobierno central, ligadas al tema de gestión de riesgos y que al mismo tiempo representan el potencial de mayor avance para reducir el riesgo; como ser: los sectores de salud, educación, ambiente y cambio climático, ordenamiento territorial, infraestructura, agricultura y turismo.
Es así que el enfoque sectorial del Plan, está dado por el trabajo que los equipos técnicos de las instituciones han realizado con el equipo de COPECO, como Secretaría Ejecutiva del SINAGER, estableciendo los linajes entre la Política de Gestión de Riesgo con las políticas, metodologías, normativas a través de acciones operativas viables dentro de las mismas instituciones.
La actualización del “Plan Nacional de Gestión Integral del Riesgo en Honduras”, estuvo a cargo de un equipo técnico de trabajo, gracias al apoyo financiero del BID a través del Primer Proyecto de Prevención y Mitigación del Riesgo a Desastres Naturales de COPECO (Proyecto MITIGAR).
El SINAGER, se encuentra en un momento crucial para generar bases sólidas en la reducción del riesgo, en busca de la seguridad humana y territorial que los hondureños nos merecemos.
La aprobación de la Política de Estado para la Gestión Integral de Riesgos el año pasado, nos ubica como país pionero, al lograr colocar la gestión de riegos en la agenda pública de éste y los próximos gobiernos, hasta el 2038.
Sumamos a este escenario, las reformas de la ley del SINAGER, que conducen hacia una gestión administrativa, técnica y legal más responsable en la mitigación del riesgo existente y en evitar nuevos riesgos.