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Las películas hondureñas «Morazán» y «Cipotes» fueron preseleccionadas para competir en los Premios Platino 2018, que galardonan lo mejor del cine iberoamericano.
Las dos propuestas nacionales que llenaron los cines del país fueron postuladas en la categoría «Mejor Película Iberoamericana de Ficción».
La selección fue realizada por la Federación Iberoamericana de Productores. Cinematográficos y Audiovisuales (FIPCA) y asociaciones nacionales de productores de cada país.
En 2014 se entregaron por primera vez los premios Platino, con el objetivo de las dos propuestas nacionales sobresalen entre los filmes del cine iberoamericano que serán premiados el 29 de abril en México.
El sello catracho «Cipotes» es una obra esperanzadora inspirada en la novela del gran escritor Ramón Amaya Amador. Boris Lara fue su director y guionista. Catica, Folofo, Lalo y el resto de los personajes regalaron momentos inolvidables a los cinéfilos catrachos.
El largometraje «Morazán», uno de los más caros de la cinematografía hondureña», muestra las últimas 48 horas de vida del paladín centroamericano, su lucha, ideales y su condena a
muerte.
La cinta fue dirigida por el cineasta Hispano Durón, bajo la producción de Dagoberto Martínez. Para su realización se recrearon escenarios que transportaron a la Costa Rica del siglo XIX. Ambas producciones nacionales son el resultado de minuciosos detalles en fotografía e iluminación.
Que los filmes formen parte de la preselección, -entre 848 obras- que intentan quedar nominadas, es un reflejo de la calidad que impera en las obras audiovisuales realizadas en Honduras.