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Una nueva caravana de migrantes (la tercera del año 2019) salió de la Gran Central Metropolitana de Transporte de San Pedro Sula, con rumbo a Estados Unidos.
En esta ocasión el éxodo de al menos 500 personas que pretende cruzar por la aduana de Aguas Calientes, fue dividido en dos grupos; y algunos de estos fueron transportados por vehículos particulares hasta el punto fronterizo en el Departamento de Cortés.
Varios de los migrantes expresaron que, desean poder llegar a Estados Unidos para buscar oportunidades de trabajo y mejorar sus vidas y las de sus familiares que se quedan en Honduras, por medio de la peligrosa ruta que deben hacer a través de Guatemala y México en donde esperan finalmente cruzar por algún punto evitando a las autoridades migratorias.
Anteriormente grupos más numerosos de migrantes han hecho el viaje a Estados Unidos, y pocos han logrado llegar a este país en busca del “sueño americano” mientras que otros han tomado la oportunidad de permanecer en México con visas de trabajo (acto puesto en práctica por el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador).
Por otra parte, los registros del Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigho), dependencia adscrita a la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional, indican que al 31 de enero del presente año se reporta el retorno obligado de 4.610 hondureños.
De estos, 2.312 fueron deportados desde Estados Unidos; 2.274 de México y 24 de los países centroamericanos.
En Honduras, los retornos obligados aumentaron en 8.3 por ciento en comparación con enero de 2018.
(Hondudiario)