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Honduras es un país que se encuentra lleno de un sinfín de monumentos que nos transportan al pasado en nuestro país, los cuales forman parte de nuestra historia nacional. Muchos de estos hacen alusión al Bicentenario de Independencia del país, cada uno con su historia propia que nos ayuda a comprender y conocer más sobre todo lo que sucedía en el país por aquellas épocas.
Cuando hablamos de monumentos no nos estamos refiriendo específicamente a una figura como tal, puesto que muchos de estos son grabados, edificios, pinturas, joyerías e incluso espacios naturales. Que vienen a ser el fruto de la herencia indígena durante la época precolombina, colonial española y la época republicana; por lo cual es de suma importancia destacar cual es la importancia que tiene cada uno de estos elementos o destinos, dentro de la historia de Honduras.
Por ello que hemos decidido mostrarle cinco monumentos que representan el Bicentenario de Independencia de Honduras, y que nos llenan de mucho orgullo como catrachos.
1. La Basílica de Suyapa
La historia como tal de la Basílica de Suyapa no se conoce, pero según lo destacado por la antropóloga Gloria Lara Pinto, el origen de la Basílica se encuentra en la Ermita. Lo primero que se construyó no fue una iglesia como tal, lo que realmente se había construido era un plante; al cual llegaban los peregrinos porque sabían de una virgen milagrosa; cabe destacar que la virgen no se encontró originalmente en el predio de Suyapa, si no que en el Piligüin. Debido a que se fue corriendo la voz de esta virgen milagrosa, fue que en el año de 1925 se le declaró como la patrona de Honduras; esto lo hizo el Papa Pio XXII.
Fue hasta 1945 que se quizo iniciar una primera etapa de la construcción; la cual no se dio hasta el año de 1954, casi 10 años después. Para 1983, el papa ofició una misa en la actual basílica que todos conocemos. Declarada como una Reserva Moral en 1993. Como parte de su infraestructura, se podría decir que esta es la iglesia con mayor Monumentalidad. Por su parte el altar de la virgen fue hecho en España por un artista valenciano. Además La basílica cuenta con 93 metros de largo por 13 metros de ancho.
2. La Gruta
Uno de los espacios más destacados de La Esperanza, Intibucá, es La Gruta. Este monumento que es la representación de creencias muy antiguas, estas unidas al culto católico. Que ha sido un paisaje sagrado de la época prehispánica; la cual, según la información brindada por Gloria Lara, fue construida en 1930 por los presidiarios. Se dice que esto fue debido a una promesa que hizo el comandante en ese momento.
Tiene 1800 metros de altura y está construida en la cueva del pequeño cerro La Crucita; la cual está dedicada a la virgen de la Inmaculada Concepción, conocida como la Virgen Lourdes. Cabe destacar que la ermita no es una iglesia, el termino gruta quiere decir que es un altar donde los peregrinos pueden ir a dejar sus ofrendas. No se trata de que se realice dentro de esta los ritos principales como las misas; realmente se hace alrededor de esta todo este tipo de actividades se hacen alrededor de ella y no dentro.
Además este lugar ya es también un lugar del mestizaje porque el rito católico ha recubierto los ritos antiguos y las creencias antiguas. Considerado como uno de los monumentos que nos llenan de orgullo
3. La Represa El Cajón
La central hidroeléctrica Genera Francisco Morazán, más conocida como El Cajón es una represa con un diseño en forma de arco de doble curvatura, que figura entre las más altas del mundo, y es la central más importante del sistema interconectado nacional siendo la obra de ingeniería más relevante del país. Que genera alrededor de 300 megavatios de energía, fundada por el Banco Mundial y por parte de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE); construida en 1980, en esa fecha inició y la inundación, es decir las subidas de las aguas a finales de 1984 y terminó en 1985.
Une el caudal de tres ríos, Comayagua, Humuya y el río Yure. Eso permite que el caudal sea tan abundante. El espejo de la represa tiene 94 kilómetros cuadrados. Esta represa se hizo cuando ya se habían hecho muchos estudios sobre su función, ubicación y demás. Se localizaron más de 80 sitios arqueológico una gran novedad que en ese espacio hubieran tantos. Durante los estudios se encontraron algunas piezas de mármol y jade; las cuales e exhiben en el museo de Comayagua.
4. Fortaleza de Santa Bárbara
La Fortaleza de Santa Bárbara, es un testigo mudo de una época cruenta, este pequeño recinto fortificado fue escenario de numerosas batallas entre los colonos españoles y los piratas que frecuentemente azotaron a la ciudad puerto en Trujillo; donde estaba inicialmente, una de las bahías más bellas de Honduras, protegida. Que según las investigaciones arqueológicas que se hicieron en 1980 señalaron que la primera construcción de esta, fue bastante modesta de madera y se encontraron algunos vestigios.
Pero debido a los incendios que sufrió este puerto fue que crearon una Fortaleza que fuera más sólida, más permanente con la que pudieran evitar los ataques. Pero llegó un momento en el que la fortaleza se convirtió en indefendible, por lo cual se trasladó hacia San Fernando de Omoa, pero en Trujillo quedan los vestigios que posiblemente data de finales del siglo XVI, inicios del XVII.
Los cañones fueron enviados de Guatemala a finales del siglo XVI. La población del lugar la conoce como “El Castillo”, pero el nombre de “Santa Bárbara” se le dio hasta mediados del siglo XIX. Fue objeto de descuido por lo cual algunas parte de sus instalaciones no se han podido mantener en pie.
5. Cuevas de Talgua
El Parque Arqueológico Cuevas de Talgua está ubicado en el municipio de Catacamas, departamento de Olancho. Ellas se catalogan como un ente de los principios más amplios del periodo Pre-clásico medio, abarcando los siglos que van de 1200-400 a. C. Considerado uno de los monumentos Históricos Nacionalales de Honduras
Las cuevas son un atractivo para los turistas nacionales y extranjeros que buscan una experiencia arqueológica, pues ahí se puede presenciar restos óseos de nuestros ancestros hallados en las cuevas. Y un hecho mágico es el resplandor que los restos producen al hacer contacto con las piedras calizas que hay en la cueva.