Monique Arch una isleña que la portería la hace volar

Algunos niños la pueden conocer solo como la maestra de la escuela Hilltop Christian School, pero la realidad es que toda Roatán conoce a Monique “Caracola” Arch como la mejor portera de su equipo actual donde demuestra que los deportes no solo son para hombres.

“Desde pequeña empecé jugando en los campos sin zapatos con mis primos, comencé de delantera porque siempre me gustaba hacer los goles, pero había un torneo donde me probaron de portera y me encantó” aclaró Arch y así fueron los inicios de su vida futbolística.

Actualmente tiene 25 años de edad pero contó que desde los 8 años amó patear una pelota y lleva más de 6 años de practicarlo profesionalmente como arquera del equipo “Las Caracolas” de la isla de Roatán.

“Hace más de 6 años me metí de portera y con sinceridad es mi mayor talento” expresó.

La apasionada por el fútbol vive en French Key, donde junto a su padre, Leonel Arch, que se dedica a fabricar botes de fibra, su madre, Ronda Arch, maestra al igual que ella, su hermano, Presto Arch, un ex jugador de fútbol muy bueno como Monique, pero se fracturó dos veces y ya no lo practica, lleva ahora ella la batuta en la sangre del talento futbolístico en la familia y todo lo que ha conseguido la “Caracola” es a puro esfuerzo y determinación por querer ser mejor cada día.

Los equipos donde ha jugado profesionalmente hasta ahora son: Kairos, FC Juticalpa, Bay Side un equipo donde jugó porque querían formar un equipo femenino y ahí logró coronarse campeona por primera vez.

Pero Arch admitió en exclusiva para Diario Roatán que de todos los equipos donde jugó en la portería el único por el que ha sentido un amor verdadero es en Las Caracolas donde ha reído, llorado, se ha enojado, pero sobre todo es feliz con sus amigas, que las considera como unas hermanas, ganen o pierdan siempre disfruta cada partido junto a ellas.

Críticas hacia Monique por ser una portera mujer

“Acepto las críticas, es lo que me ha hecho grande a mí y siempre estoy con la cabeza en alto” dijo segura de sí misma.

Además, señaló que de las mujeres es de donde escucha la mayoría de comentarios negativos pero los ignora.

En cuanto al género masculino ella argumentó que “No, para nada, más bien los hombres me motivan a estar de portera y algunos dicen que puedo llegar a la selección de Honduras porque la gente dice que soy buena, pero no juego por los comentarios sino que por mí” aseguró.

Ser el guardián de un equipo de fútbol  es asumir un reto grande ya que el aficionado al ver derrotado a su conjunto por goleada el primero en ser “devorado” por las críticas es al portero y la estrella de Las Caracolas vive diariamente esto.

“Hay 10 personas más en la cancha y el balón tiene que pasar por todos ellos antes de llegar a la portería, entonces no todo es culpa del portero y ese es el problema con gente que no sabe de fútbol, ellos creen que cuando a uno le meten varios goles solo es problema de uno, pero la culpa es de todo el grupo porque todos estamos jugando en ese momento” declaró.

Inspiraciones de la Caracola en fútbol

“Mi portera favorita es Hope Solo de la selección de Estados Unidos y de varones, Keylor Navas, de los hondureños me gustó Noel Valladares pero ya se retiró de la selección” manifestó.

También comentó que a Noel lo encontraba bien atractivo y Cristiano Ronaldo es su jugador favorito masculino porque “aparte de guapo juega bien” confesó.

La vida de una arquera en Honduras

Ella asegura que vive una vida simple, se dedica a dar clases en la escuela con su mamá, va a diario al gimnasio y le motiva seguir ganando bastantes medallas y trofeos por pura pasión.

Tras una vida normal, Arch no considera algo “sobrenatural” que a una mujer le encante el fútbol. “Hay bastantes que les gusta, es normal, porque tengo varias amigas que les fascina” aseveró.

De igual manera una vida de golera contiene bastante rivalidad con las delanteras rivales y ella vive eso con una pero prefirió dejarla en anonimato.

“En una portería siento que puedo volar atrapando balones; si me anotan me enojo porque odio que me metan goles, la primera vez que me metieron un gol no me sentí tan mal porque sabía que podía mejorar” todos estas son las sensaciones de alegría y tristeza que solo el que es un verdadero amante al deporte comprendería.

“Quiero ser grande en el futbol, sé que tengo el talento para hacerlo, como todo mundo sueña en grande yo igual y quisiera estar en un club como el Real Madrid” concluyó.

Consejos de una deportista

“Siempre me inspiro pensando en que no me meterán gol durante todo el partido” sostuvo.

“Fijarse en el balón es la clave” remarcó.

Y por último subrayó el buscar todo el apoyo posible de familiares y amigos para desarrollar el deporte de la mejor manera posible.

Datos curiosos de Monique Arch

-Su mayor record personal sin que le anoten un gol en torneos ha sido de 13 partidos.

-Las comidas favoritas de la atleta son las pastas y la baleada aunque por el gimnasio no lo puede comer seguido.

-Lleva dos meses de soltería, los novios que tuvo enfatizó que le dicen ser afortunados porque no se ve muy seguido tener una relación con una portera.

-Se graduó en el Instituto Adventista, quiere estudiar diseño gráfico en la universidad.

-El único temor que tiene es perder a sus padres.

-Los tres mayores deseos de Monique son: que su familia siempre este bien de salud, poder conocer a sus jugadores favoritos y estar jugando para el Real Madrid en un futuro.

-Antes de practicar fútbol jugó voleibol pero nunca fue lo suyo, añadió.

Sus mensajes para la población isleña

“Sigan adelante en el deporte que con talento hay grandeza y siempre con un sueño empieza todo” precisó.

“Hay jóvenes que eso (el fútbol) es su paz, su refugio y los próximos alcaldes que lleguen esperaría que logren hacer más canchas para mejorar a la juventud de la isla” exigió.

Para finalizar Monique se refirió a Roatán como “la isla más bella del mundo” donde se queda con grandes vivencias y recuerdos memorables, porque nunca creyó que sería en esa tierra que la vio crecer donde ganaría todos sus trofeos y medallas.