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Desde su regreso, mientras los Lakers intentaban conseguir un puesto en la postemporada, aumentó su carga de trabajo, jugando más de 40 minutos en cinco de los últimos ocho juegos de Los Angeles.
Después de sus 27 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias en 42 minutos que se desperdiciaron contra los Clippers, James admitió que controlar su tiempo de juego, si no está descansando completamente, es una posibilidad de avanzar.
«Uno mira el resto de los juegos, mira los porcentajes de lo que está ocurriendo en el futuro y ve lo que tiene más sentido no solo para mí sino también para el equipo», dijo James.
Por la puerta trasera… ¡LeBron James!
Con 18 juegos restantes, los Lakers (30-34) se ubican en el octavo lugar, a 5½ juegos de los San Antonio Spurs (36-29) por para el puesto final en los playoffs en la Conferencia Oeste. Los Spurs también tienen a su favor el desempate sobre Los Angeles.
A James se le preguntó qué motivación tendrían los Lakers para terminar la temporada ahora que el objetivo de la franquicia de llegar a los playoffs por primera vez en seis años parece tan remoto.
«Personalmente, [solo] puedo hablar por mí mismo», dijo. «Seguir siendo un profesional, y ser lo mejor que puedas ser todas las noches, sin importar las circunstancias. Porque siempre hay alguien mirando».