En la tarde del miércoles, Sidney tuvo una peculiar visitante que atrajo las miradas de propios extraños: una espectacular tormenta que se convirtió en el centro de atención de la ciudad australiana.
Los negros nubarrones dejaron a Sidney en una atmósfera completamente apocalíptica, algo que los usuarios de redes sociales no tardaron en retratar con sus teléfonos móviles o cámaras y subieron a sus perfiles. Debido al aspecto de la tormenta, fue calificada como una ‘tormenta monstruo’.
Sin embargo, y pese a la espectacularidad de las imágenes, esta ‘tormenta monstruo’ no conllevó mayores complicaciones y solo dejó leves chubascos. Lo que sí trajo consigo fue un gran repertorio de truenos y relámpagos, y unas imágenes para el recuerdo.