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El astro francés Kylian Mbappé desató la locura este martes en su acto de presentación con el Real Madrid, en un Santiago Bernabéu que se llenó para ver a su nueva estrella gala. Mbappé besó repetidamente el escudo del club, compartió un entusiasta “¡Hala Madrid!” y dedicó palabras de cariño a su nueva afición.
Uno de los días más esperados para los seguidores del Real Madrid se hizo realidad tras siete años de intentos por fichar al delantero. Mbappé ya es oficialmente jugador del Real Madrid, en una presentación galáctica que también sirvió para mostrar los avances del nuevo Santiago Bernabéu, incluyendo un videomarcador 360º y una pantalla gigante que proyectaba imágenes del francés.
El evento comenzó con la salida al campo del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, el presidente de honor, José Martínez Pirri, y el exjugador y exentrenador Zinedine Zidane. La ceremonia incluyó un video destacando las 15 Ligas de Campeones del club y nunca antes vistas imágenes de una visita de Mbappé a la Ciudad Deportiva del Real Madrid en 2012, donde Zidane ejerció de su entrenador.
Mbappé estuvo acompañado por su familia, personas cercanas y los niños de su fundación ‘Inspired by KM’. Florentino Pérez tomó la palabra primero, subrayando que Mbappé puede «cumplir su sueño» de vestir de blanco gracias a su perseverancia y capacidad para superar adversidades.
“Ha llegado el momento de dar la bienvenida a un jugador excepcional que viene para ayudarnos a seguir ganando. Un jugador que cumple el sueño de su vida. Damos la bienvenida a Kylian Mbappé”, expresó Pérez.
Palabras de Mbappé
Cuando Mbappé tomó la palabra, fue recibido con vítores y dedicó su discurso a ganarse aún más el cariño de la afición. «Voy a intentar hablar en español. Guau, es increíble estar aquí. He dormido muchos años con el sueño de jugar con el Real Madrid, hoy se realiza mi sueño y soy un chico muy feliz hoy. Muy feliz», comenzó.
Mbappé agradeció a Florentino Pérez y a todas las personas que trabajaron para su fichaje. «Sé que ha sido difícil, pero estoy aquí, soy un jugador del Real Madrid y toda mi familia está feliz, con mi mamá llorando…», continuó.
Cumpliendo con la petición de la afición, Mbappé se besó el escudo en numerosas ocasiones antes de abandonar el terreno de juego. Cerró su discurso con un «un, dos, tres, ¡Hala Madrid!», coreado por la multitud.
Concluidos los discursos, Mbappé dio una vuelta al campo tirando balones a la grada y besándose el escudo, en una celebración que dejó claro que el sueño del francés de vestir la camiseta blanca del Real Madrid finalmente se ha hecho realidad.
