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Kate Middleton empezó con una victoria real este 2020: una encuesta elaborada por la escuela de moda Fashion Retail Academy en Londres arrojó que el 47,8% de los británicos prefiere el estilo de la Duquesa de Cambridge en comparación con el 20,1% que votó por su cuñada, Meghan Markle. Middleton, que «demostró ser popular en todas las franjas etárias consultadas”, se transformó así en el nuevo ícono de la moda real.
Kate emerge así victoriosa en una pelea silenciosa que tiene con su cuñada desde que se conocieron. Es que desde entonces se rumorea sobre la mala relación entre ambas, y ahora que los Sussex decidieron dejar el “terreno” real, el heredero al trono y su esposa se encuentran frente a un gran desafío: llevar en solitario la carga de representar a la institución ante una generación más joven.
La reina Isabel II tiene 93 años y su esposo, el príncipe Felipe, 98. La pareja ya no viaja y en los últimos años ha delegado su representación internacional en su hijo y heredero, Carlos, y los dos hijos de este, con sus respectivas esposas.
“Al abrazar el mundo de la moda y el estilo a menudo atrevido de la Princesa Diana, Kate ha aprendido a equilibrar las tendencias con la tradición, y es agradable ver que mantiene viva la tradición”, dijo Lee Lucas, el director y CEO de la Fashion Retail Academy.
En el grupo de 18 a 24 años, el 50,67% votó por Middleton como la integrante de la realeza con mejor estilo mientras que el 37,22% eligió a Markle. Middleton también fue favorecida entre los mayores de 55 años, en comparación con Markle que obtuvo el 9,07% de los votos en el mismo grupo.
“Meghan puede haber ocupado más páginas de diarios recientemente, pero es Kate quien emergió como figura de la realeza en el país”, dijo Lucas. “Además de los diseñadores conocidos, ambas duquesas han sido vistas usando marcas como Zara, Topshop, y Marks & Spencer, lo que inmediatamente las hace más cercanas al público británico y sus opciones de moda más accesibles.”
Después de Kate y Meghan, la Reina Isabel fue nombrada el tercer ícono de la moda real más influyente, y uno de cada 10 encuestados la eligió como la favorita. Otro noble que llegó a la cima fue el príncipe Harry con el 13,9% de los votos, mientras que el príncipe William quedó en segundo lugar con el 11%. En general, el 19% de los encuestados dijeron que están influenciados por la moda real.
A primera vista parece que tienen muchas cosas en común. Ambas son plebeyas, jóvenes, inteligentes, tuvieron que aprender y adaptarse al protocolo real con rapidez, soportan el acoso mediático y fundamentalmente se casaron enamoradas de sus esposos, los príncipes y hermanos William y Harry.
Kate siempre hizo de la discreción y el perfil bajo un culto. Jamás se le conocieron declaraciones fuera de protocolo o que pudieran crear un problema. En su pasado no había padres alcohólicos, ni amigas juerguistas ni novios escandalosos que pudieran ventilar secretos de alcoba.
Su hermana Pippa y su hermano, James también se mostraban simpáticos pero sensatos. Por todo esto, la reina Isabel II la aprobó de inmediato como la futura esposa de su nieto. La consideraba una mujer ubicada, sofisticada y con clase.
Si Kate esperó 8 años hasta llegar al altar, su cuñada Meghan fue muchísimo más veloz. Conoció a Harry en una cita a ciegas, se enamoraron y empezaron una relación en secreto.
En diciembre de 2016 se mostraron por primera vez en público, 11 meses después anunciaron su compromiso y el 19 de mayo de 2018, con todo el Reino Unido paralizado, se casaron frente a casi 800 invitados en la Capilla de San Jorge en Windsor. El 6 de mayo nació Archie, el primogénito. En suma, Meghan logró en 4 años, lo que a su cuñada le llevó 12.