Los pacientes con gastroparesia suelen tener dietas deficientes en calorías, electrolitos y vitaminas. Aunque se ha observado que algunos presentan niveles bajos de vitamina D, este aspecto no ha sido investigado de manera sistemática.
Por ello, el Dr. Kenneth L. Koch, de la Universidad de Wake Forest en EE. UU., junto con investigadores de otras instituciones del país, evaluó los niveles de vitamina D y su relación con los síntomas y parámetros gástricos en pacientes con gastroparesia.
Se incluyeron a 513 pacientes y se midieron los niveles de 25-hidroxi-vitamina D al momento de la inscripción. Posteriormente, se evaluaron el índice de síntomas cardinales de gastroparesia (GCSI), el vaciamiento gástrico, y la actividad mioeléctrica gástrica mediante electrogastrografía, antes y después de la prueba de saciedad con carga de agua (WLST).
En general, los niveles de vitamina D fueron bajos (<30 ng/ml) en el 56,1% de los pacientes con síntomas, de los cuales el 54,8% presentaba vaciamiento gástrico retardado y el 59,9% vaciamiento gástrico normal. La deficiencia de vitamina D se asoció con un incremento de las náuseas y vómitos (P<0,0001), pero no con los valores específicos de saciedad o distensión abdominal. Además, se relacionó con una mayor retención de alimentos a las cuatro horas (36% de retención) en comparación con pacientes con niveles normales de vitamina D (31% de retención; P= 0,05). En pacientes con vaciamiento gástrico normal, la hipovitaminosis D se vinculó con una disminución de la actividad mioeléctrica gástrica (P = 0,001) y un aumento de la taquigastria tras la WLST (P= 0,01).
En conclusión, aproximadamente la mitad de los pacientes con síntomas de gastroparesia presentan niveles bajos de vitamina D, los cuales están asociados con náuseas, vómitos y disfunción neuromuscular gástrica.