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Eden Hazard ya ha sido operado de una fisura en el peroné distal de su pierna derecha, lesión que ya le ha ocasionado dos periodos de baja en la presente temporada y que le tendrá fuera de juego hasta el término de la misma. El objetivo del belga está claro: llegar al 100% a la Eurocopa del próximo verano, que empieza para Bélgica el 13 de junio en San Petersburgo contra Rusia.
Hazard ha sido intervenido en la Carrell Clinic de Dallas, en el estado de Texas, al sur de Estados Unidos. El encargado de llevar a cabo la operación ha sido el reputado doctor Eugene Curry. El belga viajó al continente americano el miércoles, acompañado de su padre, Thierry, y por el jefe de los servicios médicos del club blanco, Niko Mihic. El punto clave de la operación estaba en la placa de titanio que el jugador lleva instalada desde junio de 2017, cuando fue operado por una fractura de tobillo. Hazard
Esa placa le ha venido dando problemas este curso: se lesionó ante el PSG en noviembre y el club optó por un tratamiento conservador, pero tras su retorno sólo duró dos partidos, al sufrir una nueva lesión sin ni siquiera necesitar que le diesen un golpe; se produjo él mismo el problema en un taconazo mal dado. La persistencia de sus problemas de tobillo recomendaba pasar por el quirófano, pese a que le supondrá probablemente no volver a jugar con el Madrid este curso. El Madrid no informó sobre las interioridades del procedimiento quirúrgico, aunque en estos casos suele ser habitual sustituir la placa por una nueva.
El tiempo de baja estimado tras la operaciónes de entre mes y medio y dos para volver a entrenarse con sus compañeros; luego le quedaría ponerse en forma, lo que alargaría la espera hasta los dos meses y medio o tres meses. El belga, que acudió ayer al partido de la NBA entre los Dallas Mavericks y los New Orleand Pelicans e intercambió camisetas con Luka Doncic, ex de la sección de baloncesto del equipo blanco, seguirá ingresado hasta que reciba el alta médica, tras lo cual regresará a España para comenzar su recuperación. El Madrid espera que pueda participar en las últimas jornadas de LaLiga y que esté disponible para una hipotética final de Champions que, ahora mismo, parece muy lejana tras el 1-2 en la ida de octavos de Champions ante el City en el Bernabéu.