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Este anuncio sigue a una reunión clave que se llevó a cabo el domingo 8 de septiembre en la vereda Inda Sabaleta, ubicada en Tumaco, Nariño.
En un avance significativo hacia la paz en Colombia, la delegación del Gobierno colombiano anunció a la nación la continuación de las conversaciones con el grupo Segunda Marquetalia, una disidencia de las FARC, como parte de la Política de Paz Total implementada por el Gobierno de Gustavo Petro.
A pesar de los progresos en el diálogo, la jornada se vio marcada por un desafortunado episodio de violencia que resultó en la muerte de un indígena de la comunidad Awa y causó heridas a otros seis civiles. Según el informe oficial, este incidente ocurrió al finalizar la reunión, cuando miembros del Ejército intentaron acceder al resguardo indígena, provocando la resistencia de la comunidad local.
Medios colombianos relataron que, ante esta resistencia, los soldados abrieron fuego, por su parte, las autoridades militares denunciaron que la comunidad había sido manipulada por actores armados ilegales.
Ante esta situación, el Gobierno colombiano expresó su profundo pesar por los eventos ocurridos y reafirmó que pese a esa situación es claro su compromiso de continuar con las conversaciones de paz.
En relación con el reciente altercado, la Fuerza Pública ha señalado que este no es un incidente aislado, instando a la comunidad a no agredir a los soldados, advirtiendo que tales acciones podrían conllevar consecuencias legales. Asimismo, el Gobierno ha respaldado la solicitud de las autoridades territoriales para que se realicen investigaciones que esclarezcan las responsabilidades pertinentes de manera rápida y transparente.
En cuanto a los acuerdos alcanzados, se programará una reunión preparatoria esta semana en Tumaco, la cual deberá garantizar la seguridad de todos los participantes.
Además, se anunció un evento colectivo para el 21 y 22 de septiembre en el mismo municipio, en el que se espera la participación de líderes sociales, representantes de diversos sectores comunitarios y autoridades tanto territoriales como nacionales. En un paso adicional hacia la cooperación internacional, se confirmó que el segundo ciclo de conversaciones se realizará en La Habana, Cuba.
La delegación del Gobierno subrayó la importancia de alinear las políticas de seguridad con los esfuerzos de paz en el territorio, con el fin de facilitar una desescalada gradual e integral del conflicto armado en las zonas más afectadas por la violencia.
La búsqueda de una paz duradera en Colombia retomó el camino a través de los diálogos para que entre las disidencias de las FARC y las fuerzas del Estado terminen las diferencias que afecta a la población civil, en la mayoría de los casos.
