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La experta en derechos humanos sobre los desplazados internos de la ONU, Cecilia Jimenez-Damary hará su primera visita oficial a El Salvador del 14 al 18 de agosto, para evaluar la situación de los derechos humanos de las personas que se ven obligadas a abandonar sus hogares por la violencia pandillera.
«Las pandillas de El Salvador usan muchas formas de violencia y criminalidad, como asesinato, tortura, violación, explotación sexual, extorsión, desapariciones forzadas y amenazas, que no dejan más alternativa a las personas que huir de sus casas», señaló la relatora especial antes de partir al país centroamericano.
La visita de Jiménez-Damary supone una «oportunidad importante» para colaborar con el Gobierno salvadoreño y con otros actores sobre los desafíos que enfrentan, y para examinar las medidas jurídicas, de política y de tipo práctico necesarias para responder eficazmente al desplazamiento, incluida la prestación de servicios esenciales de protección para las personas afectadas», dijo.
Las cifras sugieren que, cada año, decenas de miles de personas son desplazadas por la violencia en El Salvador y que la gran mayoría se ven obligadas a huir de la persecución y de la violencia de las pandillas, según la ONU.
Muchos buscan el anonimato y se han convertido en víctimas que pasan desapercibidas, mientras que otros se unen a rutas migratorias irregulares, añadió la relatora.
Para efectuar su examen de la situación de las personas afectadas por el desplazamiento, la relatora se reunirá con altos funcionarios del Gobierno, representantes de la ONU y otras organizaciones de derechos humanos, humanitarias y de desarrollo, así como representantes de la sociedad civil y personas que han huido de sus hogares.
Los resultados de su visita se incluirán en un informe que será presentado al Consejo de Derechos Humanos en junio de 2018.