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En el barrio La Bolsa de la capital, empleados del Servicio Autónomo de Acueductos y Alcantarillados (SANAA) han iniciado una nueva jornada de protestas frente a las instalaciones de la institución.
El motivo de la protesta radica en la exigencia del pago de salarios atrasados, que se acumulan a tres meses sin haber sido honrados.
Los manifestantes alegan que, debido a la falta de pago, se les han suspendido los servicios públicos y tampoco pueden obtener crédito en las tiendas locales, lo que los coloca en una situación de dificultad económica.
Uno de los participantes en la protesta lamentó que la situación haya llevado a algunos empleados a experimentar problemas de salud mental, incluyendo casos de depresión.
Por su parte, las autoridades han argumentado que, tras cumplir con una demanda presentada por el sindicato, se han visto en una situación de descapitalización.
Ante este escenario, se hace un llamado a las autoridades para que se acerquen a dialogar con los manifestantes y se busquen acuerdos que pongan fin a las protestas. De lo contrario, los empleados advierten que continuarán con sus acciones de protesta.
Se estima que alrededor de 600 empleados se encuentran exigiendo el pago de sus salarios adeudados.
