Tegucigalpa, Honduras
El encanto de los pueblos coloniales mineros alrededor de Tegucigalpa tiene más de una veta en Santa Lucía: su historia, su arquitectura y arte religiosos y su forma atípica para un poblado español se suman a la naturaleza que ves desde cualquier punto, dentro de la zona de amortiguamiento del Parque Nacional La Tigra, a unos 1500 msnm.
De paso, impulsada por su principal fuente de ingresos: el turismo, artesanía, hostelería y restauración completan el perfil del pequeño “Surcagua” (Lugar de ranas) del siglo XVI, convertido en Santa Lucía por la riqueza de su primera mina; que hoy se despliega -a 13 km de Tegucigalpa- aferrado a las laderas de sus montañas en un atractivo laberinto de calles empedradas, que sigues a pie con clima fresco todo el año.
Aquí también encuentras al “Señor de las Mercedes”, un cristo articulado del XVI, premio de la Corona por su producción minera, cultivos de flores y hortalizas y una laguna natural con botes de remos.
El paisaje es propicio para las fotografias, de hecho Santa Lucia ya ha sido y sigue siendo inspiracion de pintores.