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Tegucigalpa, Honduras
La designada presidencial y ministra de la Presidencia, María Antonieta Guillén, resaltó este domingo, la vocación democrática del pueblo hondureño, luego de ejercer el sufragio en el centro de votación del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) en la ciudad de Tegucigalpa, Francisco Morazán.
La funcionaria depositó su voto a eso de las 7:20 de la mañana, en compañía de su esposo, Roberto Bográn Idiáquez, siendo así una de las primeras funcionarias del Presidente Pepe Lobo en hacer uso de su derecho constitucional de elegir.
En ese contexto, aseguró que para su persona es sumamente gratificante ser partícipe de este proceso que supone el establecimiento de una meta que se tenía propuesta a nivel de Gobierno.
Valoró que estas votaciones son fundamentales para el desarrollo de Honduras, por lo que vio con buenos ojos que la población cumpla con el compromiso de elegir sus autoridades.
Asimismo, hizo un llamado a los partidos políticos para que actúen en armonía entre sí a fin que estos comicios electorales se desarrollen pacíficamente y en los cuales se respete y prevalezca la voluntad del pueblo reflejado en las urnas.
Resaltó el hecho de que hay más de 800 observadores nacionales e internacionales diseminados por todo el país tanto nacional, lo que da garantías de trasparencia a las elecciones generales, al tiempo que aludió el buen trabajo que ha ejercido durante todo este proceso el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
“El voto de cada uno cuenta para definir el futuro de este noble país”, finalizó.