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Cuatro son las propuestas que serán desmenuzadas en la mesa del pre-diálogo político a la que volverán a sentarse esta semana los protagonistas del conflicto post-electoral.
En los acercamientos que son facilitados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), participaron representantes de los partidos Nacional, Liberal y designados del ex candidato de la Alianza, Salvador Nasralla.
En abril y mayo, los personeros del foro mundial hicieron un llamado a los actores de la oposición a continuar dándole vida a un esfuerzo que permita la reconciliación de la familia hondureña.
El Gobierno planteó en ese momento el compromiso de apoyar el diálogo sectorial, concebido como un entendimiento integral con los sectores políticos, económicos y sociales.
La ONU, a través de su coordinador permanente en Tegucigalpa, Igor Garafulic, ha exhortado de manera sostenida a todos los sectores de la hondureñidad a acercarse para generar confianza.
En apego a esta línea de juicios, se da por entendido que los problemas como el generado tras los comicios de noviembre de 2017, siempre deben ser resueltos sobre una conversación respetuosa y en igualdad de condiciones.
La aspiración de la mayoría de los hondureños es que se ponga fin a las diferencias políticas que producen tensiones y que debilitan la institucionalidad del país.
En febrero, la iniciativa para limar asperezas entre los grupos enfrentados por el continuismo presidencial fue impulsada por una Junta de Convocantes que -al final- fallaron en su intento.
Analistas de patio doméstico han subrayado que si los políticos no muestran compromiso alguno con los grandes objetivos del país, la sociedad civil debería de tomar las riendas de una cruzada por Honduras.
Otros segmentos propugnan porque las bases del diálogo nacional sean colocadas por los mismos hondureños sin la mediación de personajes extranjeros.
Y la oposición política aboga por un diálogo dirigido por mediadores, cuyas decisiones sean vinculantes, en tal sentido que no haya márgenes para manipulaciones ni imposiciones.
¿Cómo llegan en esta nueva jornada los protagonistas de la crisis electoral? ¿Hay o no compromiso para darle una salida a la inestabilidad institucional?