Condecoran en Guatemala a con ombudsman hondureño con la “Orden de los Cinco Volcanes”

Tegucigalpa, Honduras.

El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Roberto Herrera Cáceres, declaró hoy que la “Orden de los Cinco Volcanes en el Grado de Gran Cruz”, que le otorgó el gobierno de Guatemala, representa la esperanza firme y el trabajo paciente de centroamericanos en la perspectiva del desarrollo, la paz, la democracia y la libertad en la región.

El ombudsman hondureño agradeció el reconocimiento e instó a recuperar el sentido humano del origen del nuevo orden integracionista regional que se creó en beneficio de los pueblos centroamericanos.

Además, exhortó a aumentar la conciencia de la obligación de cumplir efectivamente los acuerdos y tratados centroamericanos que han sido aportes al mundo en materia de creaciones convencionales como la seguridad democrática y el desarrollo integral sostenible.

Herrera Cáceres recibió la distinción de manos del presidente de Guatemala, Alejandro Maldonado Aguirre, por su brillante trayectoria personal y su relevante aporte en beneficio de la unión centroamericana, situación que ha consolidado la democracia, la paz, la libertad y el desarrollo de la región.

La orden de los Cinco Volcanes en el grado de Gran Cruz, es el más alto reconocimiento que otorga el gobierno de Guatemala.

Durante su trayectoria, Herrera Cáceres contribuyó al impulso y mejoramiento del proceso de la unidad centroamericana tanto como académico, asesor y como diplomático en misiones en favor de la paz y desarrollo regional.

Fue diputado fundador del Parlamento Centroamericano (PARLACEN), donde le tocó presidir la primera comisión de reglamento y luego la comisión de integración centroamericana, en su impulso inicial por promover la perspectiva de la dignidad humana en el funcionamiento de la institucionalidad regional.

Además, contribuyó con la elaboración de recomendaciones para las cumbres presidenciales y de proyectos de tratados regionales, como la “Carta de la Comunidad del Istmo Centroamericano”.

En 1992, fue designado, presidente de la comisión preparatoria de la entrada en funcionamiento del SICA, un año después fue electo como el primer Secretario General de esa nueva organización centroamericana.

Herrera Cáceres, explicó que el Sistema de la Integración Centroamericana es un diseño humanista de igualdad y no discriminatorio entre las personas, las sociedades y los Estados centroamericanos, con un modelo propio de desarrollo sostenible y de seguridad democrática.

Indicó que el propósito primordial del SICA es convertir a Centroamérica en región de paz, libertad, democracia y desarrollo.

“Esa dirección que apunta hacia la transformación de Centroamérica está trazada también por las constituciones de todos los Estados miembros del SICA que declaran el respeto, la protección y la promoción de la dignidad humana como el propósito supremo de sus respectivas sociedades y Estados”, apuntó.

Destacó que toda la normativa integracionista centroamericana se sustenta en la vigencia efectiva de los derechos humanos de todos los habitantes de la región.

Añadió que la meta es impulsar un régimen amplio de libertad que asegure el desarrollo pleno y armonioso de las personas y de la sociedad en su conjunto, y lograr un sistema regional de bienestar y justicia económica y social para todos los pueblos de la región.

Recordó que desde 1994, se puso en vigencia la Alianza Centroamericana para el Desarrollo Sostenible que es el plan de acción a favor de las personas, el medio ambiente y el bienestar progresivo que debe servir de guía centroamericana para el desarrollo integral local, nacional y regional.

Comparó que este instrumento obligatorio, pero aún incumplido integralmente, hoy pone en evidencia la visión regional esclarecida que, en gran parte, se anticipó a la bienvenida Agenda Mundial 2030 para el Desarrollo Sostenible, adoptada recientemente por la ONU y en vigencia desde el 1 de enero del presente año, como guía de las decisiones que las Naciones Unidas adoptarán durante los próximos quince años.

Herrera Cáceres, detalló que desde 1995, los países centroamericanos cuentan con el Tratado Marco de Seguridad Democrática en Centroamérica, que es un modelo convencional propio de seguridad humana que, en la escena internacional, ha sido el primero en su género y hoy es parte de la normativa vigente en la región.

Al anterior se suma, el Protocolo de Guatemala al Tratado General de Integración Económica Centroamericana, el Tratado de Integración Social y demás convenios y acuerdos centroamericanos, en áreas sociales, culturales, ambientales y otras que corresponden al desarrollo integral.

Indicó que esa normativa jurídico-política centroamericana irradia un gran potencial de fuerza o vigor a los ordenamientos jurídicos constitucional.