Tegucigalpa, Honduras.
El primer paciente víctima del uso de la pólvora de la temporada navideña 2014, se atiende en el Hospital Materno Infantil, luego que una «cebolla» le mutilara su mano derecha.
El menor es vecino del municipio de Cane, La Paz, en la zona central de Honduras, y quien de manera inocente tomó de la calle el artefacto después de una feria y lo llevó a su casa, donde lo hizo estallar.
Esta acción, le produjo una mutilación que marcó su vida, perdió tres dedos, quedándole sólo los dedos meñique y pulgar, detalló el cirujano plástico pediatra, Omar Mejía.