El miércoles pasado, el canciller hondureño, Eduardo Enrique Reina, declaró que la relación entre Honduras y Estados Unidos en el pasado se caracterizó por ser de subyugación en lugar de amistad, y enfatizó que esta dinámica no debe continuar. Reina subrayó que ambos países son estados soberanos y deben mantener una relación digna.
El funcionario también señaló que, si bien puede haber puntos de acuerdo y desacuerdo entre ambas naciones, el gobierno de Honduras exigirá el respeto a su soberanía en todas las instancias. Reina defendió la postura de su gobierno, afirmando que la misma se ha mantenido constante en las relaciones diplomáticas con todas las naciones del mundo.
En relación a la reciente convocatoria a la embajadora de Estados Unidos, Laura Dogu, Reina explicó que esta se llevó a cabo para expresar la inconformidad del gobierno hondureño con ciertas declaraciones que consideran asuntos internos y soberanos. Informó que el diálogo fue amplio y que la embajadora recibió la comunicación del gobierno, comprometiéndose a realizar sus propias consultas con Washington.
El canciller subrayó que la elección del Fiscal General es un asunto interno del Estado hondureño y que su nombramiento es una decisión propia. Además, defendió la lucha del gobierno de Xiomara Castro contra un esquema de corrupción que, según él, se instaló en los últimos 12 años y debilitó la institucionalidad del país. Acusó a quienes se beneficiaron de esta corrupción de oponerse a la elección del Fiscal General, argumentando que buscan generar crisis y desestabilizar al gobierno, con el apoyo de ciertos sectores externos.
Reina concluyó enfatizando que no aceptarán opiniones que interfieran en las decisiones internas del Estado hondureño y reafirmó la importancia de preservar la soberanía del país en todas las instancias.