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El canciller hondureño, Eduardo Enrique Reina, reiteró su firme rechazo a la intromisión en la política interna del país en respuesta a nuevos pronunciamientos de congresistas de Estados Unidos y a anteriores opiniones de otros funcionarios. En un mensaje publicado en su cuenta de X, el canciller afirmó que no existe ningún asalto de colectivos al Congreso Nacional ni una mano dura por parte de la presidenta o del Ejecutivo hacia el mismo. Destacó que se está respetando la división de poderes en Honduras.
El canciller enfatizó que es crucial que se respete la soberanía del país y se deje de malinformar con fuentes de la oposición, quienes, según él, contribuyeron a la destrucción de la institucionalidad durante el mandato de Juan Orlando Hernández. Aseguró que Honduras fue convertida en un narcoestado y se cuestionó si se respetaron los demás poderes del Estado en ese periodo.
Además, Reina explicó que el trabajo de la Comisión Permanente del Congreso Nacional se basa en la Constitución, al igual que en Estados Unidos existe una cláusula similar para el nombramiento en receso de funcionarios, lo cual está dentro de sus competencias para designar interinamente al Fiscal General y Fiscal Adjunto.
El funcionario hondureño concluyó su mensaje de manera contundente, instando a no entrelazar la política interna de Estados Unidos con la de Honduras.
Estas declaraciones del canciller surgen en respuesta al pronunciamiento de los senadores estadounidenses Jim Risch y Marco Rubio, quienes condenaron los esfuerzos del gobierno de Xiomara Castro por socavar la separación de poderes en Honduras. Ambos son miembros de alto rango del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos y emitieron un comunicado sobre los ataques violentos contra miembros de partidos de oposición en Honduras.
