La diputada del Partido Salvador de Honduras (PSH), Maribel Espinoza, anunció que las bancadas de oposición convocarán a una sesión extraordinaria en el Congreso Nacional, ya que se han cumplido 48 días de parálisis legislativa. Aunque no especificó la fecha exacta de la convocatoria, aseguró que se realizará en las próximas horas.
Espinoza enfatizó que asistir a la sesión es un deber constitucional, y aquellos diputados que decidan no participar, lo hacen por decisión personal. Además, advirtió que una posible disolución del Congreso Nacional sería un rompimiento del Estado y un acto de fuerza, lo cual constituiría un golpe de Estado, algo que no permitirán y estarían dispuestos a denunciar ante el Ministerio Público.
La congresista subrayó que convocarán a cuantas sesiones sean necesarias para evitar que se continúe impidiendo ilegalmente el funcionamiento de ese poder del Estado. Asimismo, responsabilizó al presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, por la falta de convocatorias, indicando que responde a los intereses del Ejecutivo.
En cuanto a la posibilidad de una Asamblea Nacional Constituyente, Espinoza enfatizó que si el partido de Gobierno contempla esa opción, debería consultarse al pueblo a través de mecanismos de consulta popular, y advirtió que cualquier intento de convocarla como consecuencia de una crisis sería la omisión de delitos claramente establecidos en la Constitución y el Código Penal.