Recibe actualizaciones en tiempo real directamente en tu dispositivo, suscríbete ahora.
Habitantes de Reino Unido acuden a elecciones locales este viernes con la mira puesta en lo que sucede en Irlanda del Norte donde se calienta la carrera por la Asamblea legislativa local, en un proceso que se lleva a cabo en medio de la especulación de un resultado en el cual el Sinn Fein (partido republicano proindependentista) espera emerger como el partido más grande por primera vez.
En la última elección de la Asamblea, el Partido Unionista Democrático (el mayor de los partidos políticos unionistas de Irlanda del Norte, DUP) mantuvo el primer puesto en Stormont (Parlamento) por el margen más pequeño: ganó un escaño más que sus rivales Sinn Féin (republicanos, partidarios de la independencia de Reino Unido).
Sin embargo, si el DUP quiere seguir siendo el partido más grande y ganar el derecho a nombrar al Primer Ministro, tendrán que dar la vuelta a las encuestas, ya que actualmente están 6 puntos por detrás del partido nacionalista más grande.
Cada partido ha colocado el servicio de salud y la crisis del costo de vida al frente de sus manifiestos electorales. Sin embargo, sus prioridades difieren a partir de allí.
El Protocolo sobre Irlanda del Norte (a propósito del Brexit) también es un gran problema para todos los partidos unionistas, y el DUP dice que el Protocolo Brexit socava la posición de Irlanda del Norte como parte de Reino Unido y exige que se acuerde un nuevo pacto que sea aceptado tanto por los unionistas en Irlanda del Norte como por los nacionalistas.
Compitiendo por ser el primer partido nacionalista en ocupar el primer puesto en Stormont desde la creación de Irlanda del Norte, el Sinn Féin tiene a la salud como la prioridad de gasto número uno y, al igual que el DUP, busca proporcionar una financiación adicional para esos servicios en los próximos tres años.
El partido también quiere asegurar una fecha de los Gobiernos británico e irlandés para un referéndum de Irlanda Unida y establecer el marco necesario para prepararse para la unidad irlandesa.
Si, en definitiva, el partido más grande de Stormont proviene del lado nacionalista de la comunidad por primera vez, marcaría un momento significativo en la historia del país e inevitablemente abriría más debate sobre un futuro referéndum de unidad irlandesa.
Por otro lado, un fuerte voto unionista restaría importancia a tal debate en un futuro próximo y enviaría un mensaje al Gobierno británico de que el Protocolo sobre Irlanda del Norte es un problema que debe abordarse.
