Tegucigalpa, Honduras.
Las máximas autoridades de Trujillo y miembros de la Cámara de Turismo de aquel sector del país, buscan evitar que se repitan algunos inconvenientes que de una u otra manera molestaron a una minoría de los 2 mil 800 cruceristas que bajaron del barco la semana anterior.
La advertencia la hizo el alcalde de Trujillo, Jose Antonio Lainez al denunciar que algunos de los taxistas de la localidad cobraron precios altos en dólares a los cruceristas que tenían la necesidad de volver a la terminal marítima luego de su recorrido por el centro de la ciudad.
“Vamos a estar vigilantes de detalles como ese porque no queremos ninguna queja de los cruceristas”, expresó el edil, a solo pocas horas de recibir por segunda vez el barco “La Joya Noruega” con al menos 2 mil 300 pasajeros a bordo y mil tripulantes.
La experiencia de la semana anterior, cuando se estrenaron como destino turístico de cruceros les sirvió también para darse cuenta que necesitan instalar servicios sanitarios en áreas publicas, habilitar rampas para las personas en silla de ruedas, construir un mercado de artesanías, capacitar de manera urgente en el idioma ingles y revisar el proceso de certificación de todas las perdonas involucradas en la atención de los cruceristas para evitar las quejas presentadas en contra de los taxistas.
El gerente del puerto Banana Coast de Trujillo, Hernán Batres expresó por otro lado que las medidas de seguridad van a incrementarse en la terminal para evitar el incontrolable tráfico peatonal y vehicular que se dio la semana anterior, generada por la presencia de casi un centenar de periodistas e invitados especiales que asistieron a los actos de inauguración del puerto.
De acuerdo a la calendarización de llegada de cruceros, además del que atracará mañana, habrá uno más el 29 de octubre, dos en el mes de noviembre, seis en diciembre y 18 mas de enero a abril de 2015.