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Autoridades kenianas comunicaron este miércoles que la cifra de cadáveres encontrados de quienes integraban una secta religiosa aumentó a 95 luego de que fuera declarada un toque de queda en la zona de 12 horas por 30 días.
En este contexto, la policía arrestó este miércoles a 22 personas mientras informó que 34 personas fueron rescatadas de la propiedad del líder de la secta cristiana, Paul Makenzi.
De acuerdo con medios internacionales, el rancho de 320 hectáreas, de quien presuntamente incitó a sus seguidores a ayunar hasta la muerte para “encontrarse con Jesucristo”, ha sido declarado como “área perturbada y zona de operaciones”.
Por su parte, la Sociedad de la Cruz Roja de Kenia señaló en su más reciente informe que la cifra actualizada de personas desaparecidas es de 314.
En cambio, los activistas de derechos humanos han manifestado su rechazo a la prohibición del acceso al rancho, entretanto, apuntaron que fueron ellos quienes “destaparon” el caso.
A su vez, el titular de la Fiscalía, Noordin Haji, emitió la orden a quienes participan en el proceso investigativo de identificar los bienes de los sospechosos para proceder con la respectiva conservación, confiscación y decomiso.
Previamente, el presidente keniano, William Ruto, calificó estos sucesos de “una forma de terrorismo” mientras aseguró que las investigaciones no se detendrán hasta esclarecer completamente los acontecimientos.
