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El diputado y precandidato presidencial del Partido Liberal, Jorge Cálix, generó revuelo este miércoles al lanzar un reclamo público a través de sus redes sociales contra el canciller de la República, Enrique Reina, exigiéndole el pago de una deuda pendiente. Este enfrentamiento ha avivado tensiones políticas en un momento crucial para el país.
Cálix acusó a Reina de haber solicitado un préstamo durante su aspiración a ser magistrado del Tribunal de Justicia Electoral (TJE), indicando que el canciller necesitaba ponerse al día con su colegiación en el Colegio de Abogados de Honduras. En su mensaje, Cálix insinuó que Reina, quien en ese momento atravesaba dificultades financieras, ahora muestra una actitud «soberbia» desde su posición de poder. «No suelo hacer esto, pero ya que estás de ‘digno’, sería bueno que me pagaras lo que me pediste prestado», escribió el diputado, sugiriendo que el canciller se ha distanciado de quienes alguna vez lo ayudaron.
La respuesta de Enrique Reina no se hizo esperar. Admitió haber solicitado apoyo financiero de compañeros de partido durante su candidatura al TJE debido a una deuda acumulada por su exilio de diez años, que le impidió pagar sus obligaciones con el Colegio de Abogados. El canciller defendió su integridad, subrayando que, al igual que muchos hondureños, ha tenido deudas, pero aseguró que nunca ha recibido fondos ilícitos ni se ha vendido por un cargo.
Reina ofreció pagar la deuda con intereses a Cálix, pero cuestionó la ética detrás del reclamo del diputado, señalando que preferiría no deberle nada a alguien como él. Este intercambio público ha puesto de relieve las tensiones internas dentro del Partido Liberal, así como las crecientes divisiones en la política hondureña.
El incidente ha generado un debate intenso en la opinión pública, poniendo en el centro de atención temas como la lealtad, la integridad y el manejo de recursos en la política. Además, evidencia cómo las redes sociales se han convertido en un campo de batalla para ventilar disputas personales y políticas en el país, afectando la percepción de los líderes y la confianza en las instituciones.
A medida que las elecciones se acercan, este tipo de confrontaciones podría influir en la opinión de los votantes y en la dinámica política, mientras ambos líderes continúan sus respectivas campañas.
