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Mujeres, ancianas, jóvenes y adultos fueron arrastrados, vapuleados y detenidos por agentes de la Policía en Camino de Oriente, Managua, cuando se se agrupaban para participar este domingo en una marcha contra el Gobierno.
El amplio operativo policial dejó la detención de 38 manifestantes, de ellos 30 continúan presos y según un comunicado de la Policía, serán acusados por convocar una marcha ilegal, es decir, sin permiso previo.
En la nota de prensa, la Policía informó que de las 38 personas detenidas, ocho fueron liberadas. Las otras 30 personas que continúan en prisión serán acusadas bajo el argumento que “convocaron y participaron en manifestación pública sin el debido permiso policial, alterando la paz y la normal convivencia del pueblo”.
La Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) había convocado a la marcha bajo el lema “Unidos por la libertad”. El punto de reunión inicial sería la rotonda Jean Paul Genie, pero fue tomada por simpatizantes sandinistas desde las primeras horas de la mañana.
Los organizadores decidieron citar a los manifestantes en Camino de Oriente, pero el fuerte despliegue policial en la zona hizo que un grupo de 50 personas se refugiaran en la entrada de un supermercado, y aún no estaban marchando cuando la Policía llegó a dispersarlos y detenerles.
Los manifestantes expresaban que no estaban armados, no afectaban el tráfico y que tampoco representaban una alteración al orden público. Estaban alzando banderas de Nicaragua, y algunas ancianas rezaban y jóvenes cantaban el Himno Nacional.
(El Nuevo Diario)