El director del Centro de Investigación y Promoción de Derechos Humanos (CIPRODEH), Wilfredo Méndez, señaló que los políticos corruptos dejaron a la Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (MACCIH) “como un cascaron vació y la utilizaron como un instrumento de impunidad”.
Quien además declaró que el nombramiento del nuevo vocero de la Misión se ha tardado debido a que existe según denuncias un acuerdo entre el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro y el presidente Juan Orlando Hernández de no hacer funcionar la Maccih.
De forma tal que no se pueda combatir la corrupción y la Maccih funcione como una herramienta de impunidad, agregó que con la tardanza en la designación se le está dando la espalda y se crea superfujios, artificios que se convierten en mera ilusión.
“Hay una clara sospecha que el nuevo vocero será alguien que tenga un perfil aparentemente fuerte, pero no tendrá las agallas para luchar contra la corrupción”, declaró.
Por último, cuestionó que hay instituciones en el país que se llenan la boca ante la comunidad internacional indicando que existen mecanismos contra la corrupción pero que al final son infuncionales o llegan a funcionar bajo un esquema ya predeterminado, citando el caso denominado “La Caja Chica de la Dama”.